Con la ayuda del Consejo Nacional de Discapacidad (CONADIS), la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días ha identificado 350 familias con personas que tienen discapacidad, quienes serán beneficiadas con alimentos.
Esta medida procura auxiliar a personas vulnerables que han sido más afectadas por el impacto económico del COVID-19.
Al igual que la mayoría de países, República Dominicana ha adoptado un conjunto de medidas para la prevención y contención del COVID-19, entre las cuales se encuentran el distanciamiento físico, uso de mascarillas, suspensión de actividades que impliquen aglomeración de personas, entre otras.