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El corazón de la auyama solo lo conoce el cuchillo. ¡Es verdad! pero podemos deducir su sabor y textura partiendo de su color.
Según los entendidos, las auyamas bien amarillas salen súper buenas. Y por lo regular tienen razón. Otros, con tan solo dar un golpe seco al fruto por fuera saben si está en su punto.
Si usted tiene la suerte de saber elegir la auyama o de que su dependiente le ofrezca una que esté bien buena, solo le resta innovar en la cocina. ¡Sí! no crea que con la auyama solo tiene la alternativa de degustarlas hervidas o en las cremas de sopas, habichuelas o guandules. Sepa que con el sabor y color que se esconden en la auyama usted puede innovar en grande en la habitación de humo y grasas.
Sorprenda a sus comensales con sabrosos y novedosos platillos dulces y salados como crema, risotto, flan, salsas, mousses, pudines, auyama glaseada, gratinada y muchas más.
Las claves
Tips para cocinar con auyama
1. A la hora de consumirla, es recomendable cortar solo la parte de la auyama que se va a cocinar y guardar el resto en la nevera cubierto con papel plástico; no la deje a temperatura ambiente, prolongará su duración.
2. Combina muy bien con especies o plantas aromáticas, por ejemplo: curry o nuez moscada para platos salados y canela o vainilla para dulces.
3. Si prepara sopa de auyama, puede darle un toque gourmet introduciendo en el centro alguna preparación o sofrito de camarones picados.
4. ¿ Porqué comer auyama? Es una buena fuente de betacaroteno, vitamina E, vitamina C, potasio y fibra. Es un alimento económico y aparece todo el año.
Las recetas
Flan de auyama
2 libras de auyama
1 taza de azúcar
6 cucharadas de fécula de maíz
3 tazas de leche
3 tazas de leche de coco
2 palitos de canela
Canela en polvo
1/2 taza de pasas
1 cucharadita de mantequilla (para engrasar el molde).
sal
Preparación. Se hierve la auyama con una pizca de sal y las astillas de canela hasta que ablande. Se saca del agua y se deja enfriar a temperatura ambiente. Se licuan los ingredientes restantes (excepto las pasas) hasta que esté todo líquido. En un caldero se pone todo a fuego bajo, moviendo constantemente para evitar que se pegue al fondo. Cuando la mezcla esté suficientemente espesa (unos 10 minutos) se retira del fuego y se deja enfriar unos 2 minutos. Engrase con mantequilla un molde para flan. Vierta en el molde y deje enfriar a temperatura ambiente. Ponga en el refrigerador unas dos horas antes de desmoldar. Sirva frío decorado con crema u hojas de menta.
Quesillo de auyama
1 libra de auyama
4 huevos
1 taza de azúcar
1 lata de leche condensada
1/2 taza de crema de leche
1 cucharadita de vainilla
Preparación. Corte la auyama en trozos y cocínela en agua hasta que esté muy blanda Luego escurra y deje enfriar. En una licuadora, coloque la auyama y bata los huevos junto con la leche condensada, la vainilla y la media taza de leche cremosa. Aparte, acaramele el molde para quesillos pendiente de que el resultado sea un caramelo de color brillante y marrón claro (puede hacerlo colocando solo el azúcar, sin agua, a una llama entre moderada y alta, moviendo el envase constantemente), una vez listo mueva bien el líquido de caramelo para que cubra las paredes del molde, deje enfriar y eche la mezcla. Puede colocarlo en una olla de presión al baño María por unos 25 a 30 minutos. Luego de ese tiempo retire de la olla, deje enfriar y una vez frío lleve a la nevera sin desmoldar, solo quedará firme al día siguiente, así que tenga paciencia y desmolde al tiempo debido el resultado es una delicia, ¡vale la pena la espera!
