Miles de dominicanos y personas de otras nacionalidades se lanzaron a las calles el pasado fin de semana y respaldaron todos los espectáculos montados con artistas dominicanos en esta ciudad Nueva York.
A pesar de que hubo una temperatura que se sentía en 22 grados Fahrenheit bajo cero, brisa huracanada y una alerta oficial del alcalde de Nueva York, Bill de Blassio, para que se mantuvieran en sus hogares… el público desafió el mal tiempo para respaldar la bachata y el merengue. Hice un recorrido, y pude percatarme de este fenómeno, que todavía provoca llamadas de empresarios latinos, que se han comunicado hasta de larga distancia para conocer los resultados de ese sábado 13 de febrero.
J Peña, empresario que produjo la fiesta en el yate “Infinity”, con Sergio Vargas y Wason Brazobán, sobre las heladas aguas del río Hudson, aún se pregunta cómo fue posible que su bote fuera un “sold out” (vendido completo), como nunca antes. Félix Cabrera tuvo que abrir una segunda tanda extra de Aventura en el United Palace. Asistí a la de las cuatro de la tarde, y no cabía la gente. Con Anthony Santos, también tuvo su “sold out” el empresario dominicano Raúl Gil, allá en el auditórium de la universidad de Lehman.
Lo del merengue en el Radio City Music Hall le puso la tapa al pomo, como dicen. De las seis mil butacas del famoso teatro, cuatro mil fueron ocupadas por un público merenguero. Con este evento, El puertorriqueño Adam Torres presentó credenciales en la comunidad dominicana. Una buena cartelera y fin de semana de San Valentín, pero hay que destacar que faltaron algunos poderosos “detonantes” artísticos en este concierto. Claro, pero todos ellos, artistas y empresarios, también deben agregar en los motivos de sus celebraciones, a los medios y comunicadores que se unieron para llamar la atención de la gente por un fin de semana tan difícil que, de seguro, si hubiésemos tenido temperaturas menos peligrosas, “todavía se estuviera bailando”.