TRIPOLI.  AP.  Aviones militares británicos atacaron ayer barracas de las fuerzas de Moamar Gadafi en la capital libia, intensificando las presiones de la OTAN sobre el líder libio casi cuatro meses después del inicio de una sublevación contra su gobierno.

Los bombardeos contra las barracas —blancos reiterados de los ataques de la OTAN— siguieron al uso de helicópteros de la alianza por primera vez el sábado.  Al intensificar los ataques desde el aire y usar helicópteros para atacar a fuerzas gubernamentales libias que se esconden entre la población civil, la OTAN está proveyendo un importante apoyo a las tropas rebeldes que han tomado el control de gran parte del este del país y avanzan hacia el oeste. 

En días recientes, los rebeldes han expulsado a las tropas gubernamentales de tres ciudades en el occidente y rompieron el sitio a una cuarta ciudad.  Un funcionario del gobierno, quien habló bajo condición de anonimato, dijo que los ataques aéreos del domingo no causaron bajas porque las barracas habían sido abandonadas tras ser blanco de fuertes bombardeos en días previos.