“Ayuda mutua” como valor cooperativo

“Ayuda mutua” como valor cooperativo

Principios y valores

Las cooperativas son asociaciones formadas voluntariamente por personas que buscan un fin común, principalmente con el objetivo de satisfacer alguna o varias necesidades.

Pero, ¿Cómo pueden decenas, cientos, miles, o incluso millones de personas ponerse de acuerdo para la búsqueda de un fin común? Sencillo, aplicando la filosofía cooperativa.

Esta ideología se compone por dos ingredientes: principios y valores cooperativos, ambos elementos son como la sal y la pimienta del cooperativismo.

Dentro de los valores cooperativos encontramos la ayuda mutua, responsabilidad, democracia, igualdad, equidad y solidaridad.

Claves de una experiencia exitosa

Es importante enfatizar que el sistema cooperativo por ayuda mutua debe su originalidad y su eficacia a haber aunado los esfuerzos del Estado -que aporta el financiamiento y supervisa y controla el proceso- con el esfuerzo de los propios interesados, que realizan una parte sustantiva de la mano de obra necesaria y además toda la gestión.

La importancia de la ayuda mutua

Todos y cada uno de los valores cooperativos son muy importantes, sin embargo hoy nos enfocaremos en la ayuda mutua, retomando una definición del profesor Florencio Eguía:

La primera actitud del socio de una cooperativa es ayudar y después esperar la mutualidad, que es la reciprocidad y la respuesta de los demás.

¿Notas la importancia de que los socios de una cooperativa ejerzan este valor? Si cada uno de los miembros de la sociedad se preocupara primero en ayudar a los demás, todo se convertiría en una enorme cadena de favores y compromiso con el prójimo.

Dentro de una cooperativa todos los miembros deben ejercer este valor, sin embargo, aquellos que se registran como Dirigentes son quienes viven y contagian este espíritu de apoyo.

 “Ayuda mutua” como valor cooperativo

Las cooperativas son asociaciones formadas voluntariamente por personas que buscan un fin común, principalmente con el objetivo de satisfacer alguna o varias necesidades.

Pero, ¿Cómo pueden decenas, cientos, miles, o incluso millones de personas ponerse de acuerdo para la búsqueda de un fin común? Sencillo, aplicando la filosofía cooperativa.

Esta ideología se compone por dos ingredientes: principios y valores cooperativos, ambos elementos son como la sal y la pimienta del cooperativismo.

Dentro de los valores cooperativos encontramos la ayuda mutua, responsabilidad, democracia, igualdad, equidad y solidaridad.

La cooperativa, como organización de iguales, es el mejor vehículo para canalizar las potencialidades de cada uno y generar un vigoroso entramado de apoyos mutuos. La estructura piramidal, la división de tareas, los reaseguros democráticos que la organización cooperativa posee, son todos elementos que contribuyen a fortalecer la capacidad de hacer del grupo.

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