El choque del huracán Fiona con la República Dominicana que causó estragos en la región Este, se suma al rosario de dificultades que ha tenido que enfrentar el licenciado Abinader en sus dos años de gestión. Por esta realidad, los funcionarios deben cerrar filas al lado del mandatario, arreciando acciones para recuperar las zonas impactadas, particularmente los enclaves turísticos, para que la industria sin chimenea regrese de inmediato a producir divisas.

El sector educativo debe trabajar con esmero, terminando las escuelas inconclusas. La salud pública requiere especial cuidado, poniendo en pleno servicio la Ciudad Sanitaria Luis Aybar. Que la Dirección General de Migración arranque con batidas de deportaciones de ilegales, sintonizando con el presidente, que exclama que “RD no es solución a la crisis haitiana”. Las dificultades del Programa Siembra RD deben ser subsanadas, impulsando el auspicioso plan. Por el bien del país, ayudemos al presidente.

Le invitamos a leer: ADP: tenemos una educación que no está respondiendo a las necesidades de la población