El administrador del Banco Agrícola ratificó ayer su exhortación a los productores agropecuarios para que se acerquen a los bancos del Estado a renegociar las deudas que tienen vencidas a diciembre del 2002, al plantear que hay que darle continuidad a esta medida porque es altamente beneficiosa para el desarrollo de la agropecuaria en el país.

El ingeniero Radhamés Rodríguez Valerio dijo que en el caso del Bagrícola, los productores deben llevar sus peticiones a las sucursales de la entidad para que se le inicie el proceso de renegociación de sus deudas vencidas.

Explicó que reiteró sus instrucciones a los gerentes del Bagrícola para que continúen la aplicación de la renegociación de las deudas de los productores, no obstante el desarrollo del proceso eleccionario que culminará con un cambio de gobierno a partir del próximo 16 de agosto.

Rodríguez Valerio señaló que recibió instrucciones del Presidente Hipólito Mejía para que todas las operaciones del Bagrícola marchen de manera normal y se produzca un traspaso de mando a las nuevas autoridades, sin que se afecten los intereses de los productores.

«Tengo instrucciones del Presidente Mejía para que las operaciones del Banco marchen de manera normal, pero haciendo hincapié en el cumplimiento de la ley de bonos y el decreto que ordena la renegociación de las deudas vencidas de los productores agropecuarios a diciembre del 2002», expresó el funcionario.

Manifestó además, que en lo que queda de este período de gobierno se enfatizará en la buena marcha del programa de automatización y en la remodelación de las sucursales, de manera que la entidad opere de manera automatizada y con estructuras físicas que no tenga nada que envidiar a las instituciones financieras del sector privado.

En lo que respecta a la ley 172 03 sobre Bonos Nacionales, Rodríguez Valerio indicó que este texto autoriza al Poder Ejecutivo imprimir, emitir y negociar bonos por de 5 mil 140 millones de pesos, los cuales se destinan a refinanciar la deuda interna del sector descentralizado del Estado con el Banco de Reservas, incluyendo a la Corporación de Empresas Eléctricas Estatales (CDEEE).

También, autoriza refinanciar la deuda del Gobierno Central e instituciones descentralizadas con el Banco Agrícola y cualquier otra deuda de las instituciones estatales con el sector privado.

Precisó, asimismo, que el decreto 6010 03 que norma dicha ley, autoriza a las instituciones financieras representadas por el Banco de Reservas, el Banco Agrícola, Banco Nacional de la Vivienda y el Banco de Desarrollo Agropecuario a «renegociar, reestructurar y refinanciar los préstamos de los productores agrícolas, pecuarios y agroindustriales, vencidos al 31 de diciembre del año 2002».

En tal sentido, el funcionario destacó que ya el Banco Agrícola inició con éxito ese proceso de renegociación de deudas vencidas, y citó el caso de la sucursal de Samaná, donde se renegocian unos 848 préstamos con un saldo de capital de 20 millones 141 mil 556 pesos con 93 centavos, e intereses, comisiones y mora devengados por 19 millones 647 mil 382 pesos con 90 centavos.

Se refirió también a los casos de la regional Noroeste, que abarca las sucursales Montecristi, Santiago Rodríguez y Dajabón, donde avanza la aplicación de la renegociación de las deudas vencidas, y en San Francisco de Macorís donde el Bagrícola inició la renegociación 341 préstamos vencidos, por un monto de 56 millones de pesos.

«Nosotros aprovechamos para reiterar a nuestros deudores a que se acerquen a los bancos del Estado a renegociar las deudas agropecuarias vencidas, especialmente a nuestras sucursales, a fin de que aprovechen este mecanismo de renegociación y/o cancelación de sus préstamos, lo que le permitirá obtener recursos frescos para rehabilitar sus unidades productivas, en beneficio propio y del país», expresó Rodríguez Valerio.