Un frondoso árbol de Nim sirve de aula, de cobijo, para estudiantes del nivel básico de la escuela Salomé Ureña de la comunidad La Grúa, donde evidentemente no llega la Revolución Educativa que pregona el Gobierno a través del Ministerio de Educación.
El presidente de la Federación de Juntas de Vecinos de Imbert, Catalino Cornielle, lamentó que los estudiantes reciban clases en esas condiciones, debido al deterioro físico de la escuela, cuyas estructuras están agrietadas.
Asimismo expresó que es penoso observar cómo decenas de niños, durante ocho horas diarias, reciben docencia a la intemperie, por la tardanza de las autoridades de reconstruir el referido plantel.
Esa escuela está incluida en la Jornada Escolar Extendida, un plan que incluye ocho horas de clases diarias, a las que se añaden actividades lúdicas y recreativas.
Cornielle dijo que es una falta de respeto a la dignidad humana que los estudiantes estén sometidos a esta situación.
También destacó que no se requiere más evidencia de la triste realidad para saber que un árbol no es la cobija para que niños y jóvenes reciban docencia porque su escuela no sirve como ocurre en el paraje La Grúa.
El dirigente comunitario explicó que cuando se producen aguaceros en la zona la docencia hay que suspenderla de inmediato por razones obvias.
Al hacer el señalamiento se preguntó si el 4% del PIB destinado al sector educativo se usa correctamente, porque no se explica la ausencia de la respuesta oficial al reclamo.
Cornielle reiteró que la escuela Salomé Ureña es una especie de bomba de tiempo que amenaza la integridad física de los alumnos y sus profesores.
Respuesta oficial
El vocero del Distrito Escolar 11-03, en Imbert, Kelvin Jáquez, expresó que la encargada del departamento, María Elena Ramos, ha realizado gestiones ante las autoridades nacionales de Educación para solucionar la calamitosa situación que pasan los estudiantes y profesores de dicha escuela, pero hasta ahora no ha recibido respuestas positivas.
Responsabilidad del Gobierno
Jáquez explicó que esta función es una responsabilidad del Gobierno a través de los ministerios de Educación y Obras Públicas.