Ballenas atrajeron curiosos

<p>Ballenas atrajeron curiosos</p>

POR ODALIS MEJIA
Gran revuelo causó la presencia de una ballena junto a su ballenato en las costas próximas  al  kilómetro 10 de la autopista Las Américas, los que se mantuvieron merodeando por varias horas desde la media mañana de ayer.

Decenas de personas se aglomeraron a la costa para observar la ballena,  motivo por el cual se originó un tapón en la autopista, ya que los transeúntes que se desplazaban  se detenían a ver el mamífero marino.

Personal de la Subsecretaría de Areas Protegidas de Medio Ambiente, del Acuario Nacional y  de la  Marina de Guerra acudió al lugar para investigar las razones por las cuales las especies se encontraban paseando por la orilla del mar.

 En tanto,  agentes en patrulleros de la Policía Nacional montaron una vigilancia en la zona a fin de mantener el orden y prevenir delitos.

Según se informó a través de la Dirección de Comunicaciones de Medio Ambiente, no es nada raro la presencia de la ballena y su hijo, que al parecer se encontraba paseando por la zona.

Inmediatamente se avisó de la presencia de la ballena, el director del Acuario Nacional, Enrique Pugibet, se mantuvo próximo al animal  en un bote, tratando de verificar las condiciones físicas en que se encontraba. Puigibet explicó que los cretáceos se encontraban en perfectas condiciones y que sólo estaban “cantando y jugando, dándole un espectáculo gratuito a la población”, por lo que descartó que se quedaran atrapadas por alguna red o cualquier otro objeto. La ballena y su hijo fueron avistados primeramente en las cercanías de la avenida España y prosiguieron su paseo para las costas de la autopista las Américas.

Se recuerda que desde principios de mes de febrero hasta iniciado el mes de abril es la temporada de visitación de las ballenas jorobadas que vienen a la zona Norte del país a parir y aparearse desde las frías zonas del Atlántico, aprovechando la calidez de las aguas del Mar Caribe.

Según la Secretaría de Medio Ambiente, en ocasiones algunas ballenas se separan del  grupo y merodean por las costas, tras descartar que el espécimen se encuentre en esa zona por alguna afección o porque algún objeto le haya atrapado.

En el país existe desde hace algunos años la Red Dominicana de Varamiento, compuesta por personas de diferentes instituciones que tienen conocimiento sobre especies marinas y que velan por su conservación.

La presencia de ballenas jorobadas, especie en extinción,  en el país concita un gran flujo de turistas nacionales y extranjeros a la zona Norte, específicamente a Samaná, por lo que la temporada genera cuantiosos recursos a la industria turística.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas