La inflación correspondiente al mes pasado, medida por la variación del índice de Precios al Consumidor (IPC), experimentó un crecimiento de 1.35%, lo que ubicó en 32.88% la tasa de inflación acumulada de los primeros diez meses de este año.

Cabe resaltar que en este incremento incidió la puesta en vigencia de la Ley 288-04, sobre reforma tributaria, que incluyó aumentos en los Impuestos Selectivo al Consumo (ISC) y de la Transferencia de Bienes Industrializados y Servicios (ITBIS).

El impacto de la reforma fiscal inicialmente se estimó en 4.15% para el mes de octubre; pero el saldo registrado en esa variable fue de 2.80 puntos porcentuales menor al nivel previsto, lo que se atribuye al efecto compensatorio provocado por la reducción del tipo de cambio.

También, a la baja de precios que continúan registrando los bienes alimenticios de alta ponderación en la canasta familiar.

Este comportamiento de los precios se produjo no obstante las alzas significativas de los precios internacionales del petróleo, que el pasado mes alcanzaron niveles sin precedentes.

Un análisis comparativo de los efectos en el IPC mensual, en períodos anteriores cuando se han aplicado reformas en el sistema tributario, arroja que el aumento en la tasa de inflación de 1.35%, por efecto de la reforma aplicada en octubre de 2004, ha sido inferior a las aplicadas anteriormente.

La afirmación anterior se comprueba al observar la inflación originada por la reforma de junio de 1984 que fue de 4.31%; la de junio de 1992 que alcanzó 2.74% y la de enero de 2001 que incrementó los precios en 2.50 por ciento.

Esto evidencia que la recuperación de la confianza de los agentes económicos y la política económica aplicada por las nuevas autoridades, continúan ejerciendo un impacto positivo en la economía.

Según el informe mensual elaborado por el Departamento de Cuentas Nacionales del Banco Central, la inflación anualizada alcanzó 46.09%, registrando una caída desde junio a octubre de -23.6%, y con respecto a septiembre de -3.8%, mostrando la continuación de la desaceleración de los precios internos de la economía.

En el resultado del índice del mes de octubre, los grupos de bienes y servicios de mayor incidencia fueron Diversos y Transporte, los cuales experimentaron variaciones de 7.72% y 1.67%, respectivamente.

Sin embargo, los grupos Alimentos, Bebidas y Tabaco, el de mayor ponderación de la canasta, creció apenas 0.23 por ciento.

Esta variación del grupo Alimentos, Bebidas y Tabaco de tan solo 0.23%, es el resultado del saldo de la disminución de -0.96% en los alimentos y del incremento de 7.85% en las bebidas y 22.90% en los cigarrillos, al resultar estos últimos afectados por los ajustes en el ISC y el ITBIS, respectivamente.

En la variación del grupo Bienes y Servicios Diversos incidió principalmente la aplicación de la tasa de 10% del ISC a los servicios telefónicos, así como el aumento de la tasa del ITBIS aplicado a los servicios de comunicaciones, televisión por cable y seguros.

En cuanto al crecimiento del grupo Transporte se atribuye al incremento de los precios de la gasolina Premium (2.39%), y regular (3.28%), en cumplimiento a la Ley 112-00 de los Hidrocarburos y a la evolución de los precios internacionales del petróleo, que alcanzaron niveles sin precedentes en el mes de octubre.

Este aumento no fue mayor por el comportamiento del tipo de cambio, cuya disminución compensó, en gran medida, el alza de los precios del petróleo.

En octubre, la variación del índice de los bienes transables creció 1.25%, ligeramente menor que la variación experimentada por el índice general, derivado de las alzas en las bebidas, cigarrillos, gasolina y vehículos, compensadas parcialmente por las disminuciones de los pasajes aéreos y algunos bienes alimenticios.

En lo referente a la variación del índice de los no transables, fue de 1.44% como resultado del alza de los servicios telefónicos, los seguros de vehículos y la comida preparada fuera del hogar, mientras que los descensos en los precios del arroz selecto, pollo fresco y leche en polvo, atenuaron en cierta forma el crecimiento de este indicador.

En cuanto al IPC por áreas geográficas, el Distrito Nacional creció en 1.77%, mientras que el Resto Urbano fue de 1.59% y en el Rural fue de 0.83%, con relación al mes de septiembre.

El menor incremento registrado en el Resto Rural obedece al efecto combinado de la elevada ponderación de los bienes alimenticios en este segmento poblacional, que arrojaron variaciones negativas, con la baja importancia relativa del subgrupo comunicaciones.

En lo relativo al impacto de la inflación por estratos socioeconómicos se observa que el primer quintil, el de menor gasto, registró una tasa de crecimiento de 0.60%, la menor, mientras que el quinto quintil experimentó 0.94%, lo que evidencia la progresividad de la reforma tributaria, pues los sectores de bajos ingresos de la sociedad fueron impactados en menor proporción por sus efectos.

La variación de los servicios de comunicaciones tuvo la mayor incidencia en el quintil cinco, el de mayor nivel de gasto; en tanto que la reducción de los precios de los bienes alimenticios de alta ponderación repercutió con más profundidad en los segmentos de menor nivel de gasto.