Banco de Semillas, el patrimonio genético de plantas forestales

Banco de Semillas, el patrimonio genético de plantas forestales

El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales posee un Banco de Semillas en Nigua, San Cristóbal. Esta iniciativa tiene el objetivo de conservar y garantizar el patrimonio genético de las plantas forestales en nuestro país.

Así lo explicaron Johnny Rodríguez, encargado del Departamento de Producción; Rumarda Urbáez, encargada del Laboratorio del Banco de Semillas, y Porfirio Antonio Peralta, encargado de Recolección.

Estos especialistas explicaron que se trata del primer Banco de Semillas Endémicas y Nativas de la República Dominicana y el Caribe que cuenta, además, con varios viveros a nivel nacional.

De acuerdo a lo explicado por los especialistas a grandes rasgos, el Laboratorio de Semillas Forestales genera informaciones sobre la calidad de las germoplasmas adquiridas por la institución para suplir la demanda de producción de plantas utilizadas en la restauración de ecosistemas, reforestación y producción forestal de la entidad, y a partir de ahí, cubrir las necesidades del territorio.

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Johnny Rodríguez, explicó que los primeros esfuerzos iniciaron en 1990 con la creación de un laboratorio de semilla y el objetivo de evaluar su calidad.

“Luego, en el año 2010 finalmente nace lo que es Banco de Semillas, que hoy en día es un referente para toda la región”, explicó el encargado del Departamento de Producción.

El funcionario agregó además que varios países de América Latina vienen a recibir capacitación a la República Dominicana.

De su lado, la bióloga Rumarda Urbáez, técnico forestal y encargada del Laboratorio de Semillas, resalta la importancia de analizar los frutos que se recolectan debido a que es esencial, pues de ese proceso se determina la eficacia de las actividades de selección, recolección, procesamiento y almacenamiento.

El éxito de la producción de plantas en los viveros y de su establecimiento ulterior en plantaciones forestales depende en gran medida de la eficacia de la semilla que se utiliza”, comenta Urbáez.

Clasificación

De acuerdo a lo explicado por los especialistas, para cada semilla existe una clasificación, como son las recalcitrantes, que no toleran el secado sin perder su viabilidad, y las ortodoxas, que sí toleran el secado hasta un porcentaje aceptable y posterior almacenamiento.

Se analizan más de 400 lotes cada año de especies como Cabirma Santa (Guarea guidonea), Cabirma Guinea (Carapa guianensis), Caoba Criolla, (Swietenia mahagoni), Roble (Catalpa longissima), Cedro (Cedrela odorata) y Pino Criollo (Pinus occidentalis).

Igual, monitorean semillas almacenadas de años, conoce la disponibilidad en existencia, información indispensable para definir la cantidad por especie para producir las plantas requeridas para cumplir la meta de reforestación anual del Ministerio y apoyar las iniciativas de restauración y reforestación gestadas desde la sociedad civil.

Acopio

El 90% de las semillas del banco son nativas o endémicas. Parte del trabajo son las pruebas de laboratorio para comprobar la tolerancia al secado y almacenamiento de las semillas, ya que para conservar su viabilidad deben resguardarse a una temperatura y un porcentaje de humedad establecidos, según la especie, algunas no deben empacarse.

Las semillas son repartidas en calidad de donación a solicitud.