BUDAPEST.   Agencias.  El Banco Europeo para la Reconstrucción y el Desarrollo (BERD) advirtió ayer del riesgo de contagio por las turbulencias en los mercados de Hungría ante la presunta resistencia de Budapest a tomar más medidas de austeridad.

Los mercados estaban más calmados ayer que en la víspera, pero el Gobierno recortó en 10.000 millones de florines la oferta de la subasta de letras a tres meses y el rendimiento de la operación fue mucho más alto que en una anterior, algo que los analistas consideran como otra muestra de la incertidumbre que rodea a las finanzas húngaras. El florín se estabilizaba ayer en la mañana después de haberse desplomado más del 3% el lunes tras suspenderse las negociaciones entre Budapest, el Fondo Monetario Internacional (FMI) y la Unión Europea después de que Hungría rechazase las peticiones de más recortes de gastos.

«(La subasta) fue bien, esperábamos que fuese algo más floja», dijo Peter Attard Montalto de Nomura. «El recorte en la ratio de cobertura de 1,5 veces muestra el nivel de incertidumbre y prudencia que se encuentra bajo la superficie en este momento tras los acontecimientos del fin de semana», agregó.

Un operador de renta fija en Budapest dijo que los mercados estaban internalizando una subida de las tasas de interés en los próximos meses, después de que el banco central húngaro dijese el lunes que estaba dispuesto a subir los tipos si fuese necesario.

En todo caso, los mercados de renta variable seguían tambaleantes, después de que el BERD advirtiese de un contagio, aunque precisó que esperaba que Budapest llegase a un acuerdo con el FMI en cuestión de semanas. «El caso de Hungría conlleva un riesgo de contagio a otros países de Europa del Este, pero pueden protegerse de esto en la medida en que continúen sus reformas y reestructuraciones», dijo el presidente del BERD, Thomas Mirow, en  entrevista al diario alemán Handelsblatt. «Creo que el Gobierno húngaro acordará una solución con el FMI en las próximas semanas», dijo.