El reto del país, según el Banco Mundial,  es lograr que su desarrollo económico conlleve a la vez equidad social, debido a que  la inequidad es un ancla para el desarrollo de los países. Según estudios, las sociedades con niveles mayores  de inequidad se desarrollan menos.

Roby  Senderowitsch, representante local del Banco Mundial, dijo  que República Dominicana tiene desafíos importantes en  su  capital humano que están anclando su desarrollo potencial. Agregó que actualmente no son aprovechadas  al máximo las ventajas comparativas de  su ubicación geográfica, cerca de Estados Unidos y Europa,  por los problemas que se enfrentan en el sector educativo y de salud. Dijo que  estos son temas importantes que no pueden seguir esperando.

 “Se puede crecer con equidad y además se crece más cuando hay equidad. Las dos cosas se pueden hacer a un mismo tiempo. Se puede crecer por un lado y, por otro lado, tener políticas redistributivas de esas riquezas e invertir en capital humano”, expresó.

Reconoció que las personas pobres son las más vulvenerables a los fenómenos naturales, a las crisis económicas y a las guerras, mientras que  las sociedades con mayores niveles de inequidad son aquellas que se ven más afectadas cuando ocurren esos problemas.

Agregó que los programas de protección social (como es el programa Solidaridad) pueden jugar un papel importante en el aumento de capital humano y en promover la equidad social. Senderowitsch, durante su discurso en la apertura del seminario sobre protección social en el Hotel Hilton, apoyó más inversión en educación y mejor calidad de la misma, ya que de no mejorar el capital humano se comprometen la competitividad del país. 

Abogó porque los  maestros impartan más horas de docencia, se   mejore la salud materna, y que la juventud tenga acceso a  educación.

Recordó que solamente el 25%  de los estudiantes  pasa la prueba del bachillerato, es decir que de cada 10 estudiantes, siete y medio no pasan la prueba.  Mientras  más de 150 mujeres mueren al dar a luz  de cada 100 mil. Es decir, mueren 300 mujeres por año al dar a luz, cuando el 98% de los partos se dan en centro de salud.  Indicó que estos dos problemas se  reflejan en la productividad del país y en su crecimiento.

El discurso inicial del seminario estuvo a cargo del vicepresidente de la República, Rafael Alburquerque, que habló sobre   los aportes del Gobierno en los programas de Solidaridad.

Desafíos

Entre los desafíos que enfrenta el país para mejorar los programas de protección social se encuentran el  poder vincular mejor lo que hacen los diferentes ministerios. Según expresó Senderowitsch,  la protección social no es la facultad de un sólo ministerio, sino que  hay que poder articular mejor lo que está haciendo cada sector.

Dijo además  que se debe seguir preparando los programas sociales para responder a próximas crisis, sean financiera, económica o provocada por algún fenómeno natural.

Recomendó que la inversión en capital humano en el país sea  para todos, no sólo para los pobres.

 Por igual, se debe  proteger a los grupos más pobres por vía del régimen subsidiario y mejorar la calidad de los servicios de salud con énfasis en el primer nivel de atención.

El representante del banco Mundial  resaltó que el  gasto social no es un gasto, sino  una inversión en el capital humano.

El seminario que realiza el Banco Mundial será hasta hoy, y en este se mostrarán los logros, desafíos y lecciones aprendidas en los programas de protección social en el país para lograr que estos sean más incluyentes y eficaces.