Banco Mundial expresa dudas sobre CAFTA-RD

Banco Mundial expresa dudas sobre CAFTA-RD

DE LOS SERVICIOS DE HOY
El presidente Leonel Fernández pidió ayer en Washington que el gobierno de Estados Unidos declare de alto interés la aprobación del Tratado de Libre Comercio (TLC) con Centroamérica y República Dominicana, mientras el Banco Mundial advirtió que ese acuerdo no aumentará el crecimiento o el desarrollo a menos que sea acompañado de reformas.

Fernández habló a su salida del Capitolio donde sostuvo una reunión con congresistas que apoyan el TLC. Hoy el presidente George Bush se reunirá con mandatarios de las cinco naciones centroamericanas y el dominicano.

“Es improbable que el acuerdo por sí mismo produzca beneficios sustanciales de desarrollo sin esfuerzos paralelos», como la mejora de los transportes, la educación y la lucha contra la corrupción, explica un resumen «preliminar» del informe divulgado ayer por la agencia española de noticias EFE en un cable fechado en Washington.

El documento completo, que será publicado el mes próximo, explicó EFE, analiza los posibles beneficios y perjuicios para América Central del TLC, que ha sido firmado por El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua, El Salvador, República Dominicana y Estados Unidos.

«No se puede esperar que el DR-CAFTA (como se conoce el acuerdo por sus siglas en inglés) produzca niveles radicalmente más altos de comercio y crecimiento, por las mismas razones que las políticas comerciales desde principios de los 90 han dado resultados tan solo limitados», explica el resumen.

Desde esa época los países del istmo han reducido sus barreras aduaneras, pero esa apertura no ha sido suficiente para elevar el crecimiento y reducir la pobreza «de manera radical», explica el informe.

El Banco Mundial se ha colocado a favor del TLC desde el inicio de su negociación y en el documento enfatiza que el tratado tiene «el potencial de aumentar el comercio y la inversión en la región».

Esta evaluación hizo que la oficina del representante de Comercio Exterior de Estados Unidos enviase ayer un correo electrónico a la prensa en el que dice que el informe del Banco Mundial «alaba» al TLC, informó EFE.

Plantea el informe que el acuerdo provocará bajas de precios en ciertos productos y una reestructuración en las economías para la que los países tienen que estar preparados.

Los expertos del Banco Mundial, que no analizaron los posibles efectos en la República Dominicana, constatan que la gran mayoría de los centroamericanos se beneficiarán del tratado, pero una minoría de habitantes del campo, donde se concentra la población más pobre, se verá perjudicada.

Los consumidores se aprovecharán de la caída de los precios con la supresión progresiva de las altas barreras aduaneras a las importaciones de maíz, frijoles, productos lácteos y pollo, por ejemplo.

En cambio, este efecto será negativo para 9% de las familias nicaragüenses, 16% de las guatemaltecas y 5% de las salvadoreñas que viven de la producción de esos alimentos, según el Banco Mundial, que no ofrece datos de Costa Rica y Honduras.

Para minimizar este impacto, el Banco recomienda que los gobiernos mejoren el acceso a la educación y su calidad, que inviertan más en infraestructura y extiendan el crédito en zonas rurales, y que también aumenten la capacitación de los campesinos.

Otra opción es un programa de ayudas económicas directas a las familias, aunque el Banco Mundial señala que, en otros países, proyectos de este tipo no siempre han tenido éxito.

El documento concuerda con uno de los principales argumentos usados por los partidarios del TLC: que el acuerdo aumentará la certidumbre para los inversionistas al hacer permanentes los beneficios arancelarios para exportar a Estados Unidos, que disfrutan actualmente esos países.

No obstante, señala que el acuerdo mantiene reglas de origen de los insumos usados por las maquilas «todavía excesivamente restrictivas».

El acuerdo obliga al sector a comprar la gran mayoría de las fibras y las telas a Estados Unidos que las vende a mayor precio que otros países.

Además, advierte de que las perspectivas de la industria textil centroamericana son «frágiles» debido a la competencia de los países asiáticos.

FERNÁNDEZ

Fernández dijo en Washington que el tratado no es solo una estrategia de desarrollo comercial económico y social, sino que también representa el fortalecimiento de las democracias en estas naciones.

El mandatario se reunió ayer con los senadores Bill Frist, líder republicano, y Richard Lugar, y como con los demócratas Mack Baucus y Christopher Dodd.

La dirección de Información del Palacio Presidencial en Santo Domingo informó que los senadores estadounidenses se comprometieron a dar su apoyo abierto y público al TLC.

En la reunión participaron los presidentes Fernández, Abel Pacheco, de Costa Rica; Elías Antonio Saca, de El Salvador; Ricardo Maduro, de Honduras; Oscar Berger Perdomo, de Guatemala, y Enrique Bolaños, de Nicaragua.

Fernández dijo que en el «caso dominicano, el 85% de nuestro comercio se realiza con el mercado norteamericano, por lo que sería perjudicial para el país la sanción desfavorable del tratado».

«La aprobación del RD-CAFTA garantiza un acceso permanente de los países de la región al mercado de los Estados Unidos», precisó Fernández.

«Nunca han visto una Centroamérica más unida en la historia. Nunca ha sucedido que aquí estemos seis presidentes buscando el mismo objetivo y que hemos negociado en forma conjunta con Estados Unidos. Esta es una demostración que se combina con este tratado histórico que va a beneficiar enormemente a las partes y preservar y fortalecer nuestro sistema democrático. El CAFTA es absolutamente clave en todo esto», dijo Fernández.

Hoy, Fernández y los presidentes centroamericanos se reunirán con Bush.

Los presidentes que han visitado diez ciudades desde el pasado lunes camino a la capital estadounidense promoviendo el tratado. Desayunarán hoy con Bush y luego tendrán una reunión de trabajo. Alrededor del mediodía darán en la Casa Blanca una rueda de prensa.

OTRA REUNION

Ayer, el presidente Fernández y los mandatarios centroamericanos se reunieron una hora con el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld. Previamente habían recibido honores militares de un batallón en los jardines del Pentágono.

Concluida la ceremonia de honores, pasaron a saludar a un grupo de trabajadores centroamericanos y dominicanos que acudieron como invitados.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas