El Banco Popular Dominicano informó que redujo su consumo de papel durante el año pasado en cinco por ciento, al disminuir el volumen utilizado desde las 78,490 resmas (39.24 millones de pliegos de papel) en 2012 a las 74,758 resmas (37.37 millones de pliegos) en 2013.

De acuerdo a un comunicado, para el mismo periodo, el uso de cajas para empacar y archivar documentos mermó en 16 por ciento, mientras que la utilización de volantes genéricos cayó en uno por ciento.

Explicó que esta variación es fruto de la creciente conciencia medioambiental que la institución y sus empleados llevan a cabo a lo interno de la organización, mediante una serie de proyectos que la encaminan a ser cada día más ecoeficiente en sus operaciones y en su infraestructura.

Oficinas alimentadas por energía solar. La entidad financiera dijo que desarrolla desde 2011 una red de oficinas fotovoltaicas u oficinas verdes. Se trata de sucursales especiales, cuyo funcionamiento eléctrico es alimentando en su totalidad por energía solar.

Comunicó que al día de hoy existen 15 oficinas que operan con este sistema fotovoltaico y la organización proyecta duplicar su número en pocos años.

Además, en las dependencias generales y en un total de 88 oficinas del Popular operan sistemas que permiten tener un uso más eficiente de los recursos, como sensores de movimiento para controlar la luz y reguladores del aire acondicionado o del agua en los baños.

Medición de la eficiencia energética. Señaló que para medir los avances en los niveles de eficiencia energética, utiliza un sistema de automatización, que permite calcular la cantidad de árboles que se han dejado de talar, el dióxido de carbono que se ha dejado de emitir a la atmósfera y la calidad del aire interno en las oficinas automatizadas hasta el momento.

“Gracias a estos procesos, la organización bancaria obtiene un balance claro de cuál es el impacto de su huella ambiental y cómo contribuye con sus acciones a un ecosistema sostenible”, agrega la nota.