La presunta banda criminal que supuestamente participó en el atraco en el que murió el niño Gioser Féliz, hizo labor de inteligencia para dar con su objetivo: el padre del infante, a quien querían matarlo para luego despojarlo de sus pertenencias.
Así lo detalla el Ministerio Público en una nota de prensa, en la que dijo que los jóvenes, quienes están detenidos y por los que solicitaron un año de prisión preventiva, dieron seguimiento a Sergio Luis Féliz, padre del menor, quienes venían desde Estados Unidos por la provincia Santiago.
En la instancia, la Fiscalía sustenta esta solicitud en una multiplicidad de pruebas periciales, testimoniales, documentales y materiales que ha recabado contra los imputados Derlyn Javier Mercado Martínez (Eyery), de 24 años; César Junior Ulloa Cuevas, 23 años; Luis Ángel Vargas Brito, (el Cuñao), 20 años; José Manuel Almonte Santana (Buqui), 20 años; Elián Martínez Sánchez (Odalis y/o la Leche), 21 años, y Tomás Peña Morel (Tomasito).
Este órgano investigador, a través del Departamento de Violencias Físicas (Homicidio), inició las diligencias de investigación que dejaron al descubierto la trama orquestada por los imputados para dar seguimiento a la llegada al país del padre del menor G.L.F.C., la también víctima Sergio Luis Féliz Mancebo, a fin de darles persecución y muerte, y así despojarle de sus pertenencias.
La búsqueda de estos elementos probatorios identificó a Peña Morel, como quien, junto a Mercado Martínez, planificó el crimen.
La Fiscalía posee evidencias acerca de la obtención, por parte de alias Tomasito, del día, hora, número de vuelo y línea aérea a través de la cual Féliz Mancebo llegaría al país, por lo que el miércoles 19 de abril, Derlyn Javier, César Junior, Luis Ángel, José Manuel y Elián, se dirigieron al Aeropuerto Internacional del Cibao, a bordo de un carro Hyundai, color blanco, para desde allí ubicar a las víctimas que abordarían un yip Honda CRV, y ejecutar el crimen.
El Ministerio Público resalta que, una vez consumado el crimen, Tomás Peña (a) Tomasito, considerado como un amigo por el padre del menor de edad, lo acompañó al Inacif (Instituto Nacional de Ciencias Forenses), y a todos los lugares donde el padre debió acudir para organizar los servicios fúnebres de su hijo y, valiéndose de esa cercanía, les comunicaba a los demás integrantes de la banda criminal, los pormenores de las investigaciones.
Narra la Fiscalía que los imputados inician la persecución e intentando interceptar a las víctimas, en las cercanías de la intercepción que conecta la Circunvalación Norte con la autopista Joaquín Balaguer, uno de los imputados baja el cristal y dispara, impactando al menor de edad.
Contra los imputados la Fiscalía presentó cargos provisionales tipificados y sancionados en los artículos 265, 266, 2, 379, 382, 386-2, 295 y 304 del Código Penal Dominicano, que contemplan sanciones contra la asociación de malhechores, homicidio y robo agravado, este último en grado de tentativa.
También, se le atribuye al grupo criminal la violación a la Ley 631-16 para el Control y Regulación de Armas, Municiones y Materiales Relacionados, por el uso del arma con la que se arrebató la vida a la víctima menor de edad.