MIAMI. Antonio Banderas y Pedro Almodóvar comparten una amistad de cuatro décadas. Una amistad intensa, pero con límites.
Por eso, cuando el actor español leyó por primera vez el guion del personaje autobiográfico que había escrito el realizador manchego para su más reciente película, se sorprendió. Había partes de la vida de su amigo que desconocía y que ahora le tocaba representar como Salvador Mallo, el personaje principal de “Dolor y gloria”.
“Pedro Almodóvar es una persona muy privada, y yo lo entendía. Yo nunca traté de traspasar esos límites”, manifestó Banderas en una entrevista realizada el miércoles en Miami, pocos días después de alzarse con el premio al mejor actor en el Festival de Cine de Cannes.
“Cuando leí el guion me sorprendió muchísimo el aspecto confesional del mismo y el paso que él daba a enseñar una parte de él que, incluso a las personas que habíamos sido amigas de él durante tantos años, nunca nos había dicho”, agregó
En el filme, Salvador Mallo es un cineasta famoso que reflexiona sobre su vida y su carrera.
“Dolor y gloria” recorre el presente de Mallo y su infancia en un drama personal que aborda partes privadas y hasta ahora desconocidas de la vida de Almodóvar. Junto con Banderas actúan Penélope Cruz, Asier Etxeandia, Leonardo Sbaraglia, Julieta Serrano y Cecilia Roth, entre otros.
La cinta, que se estrenó en marzo en España, era una de las favoritas para obtener la Palma de Oro en la reciente edición del festival de la Riviera francesa. Pero el galardonado fue Banderas, por su papel protagónico.
“Pues es una sensación agridulce”, aseguró Banderas refiriéndose a su reconocimiento en Cannes, y de inmediato explicó que las reglas del festival no permiten que una misma película obtenga el premio mayor y también sea consagrado uno de sus actores, o a la inversa.