Barcelona, España. (AFP) – El FC Barcelona tiene hoy  una de las citas más importantes de los últimos años, cuando se juegue en su propio campo la supervivencia en la Liga de Campeones ante el Werder Bremen alemán, ya que sólo tiene la opción de ganar si quiere pasar de ronda.

Gran parte de las opciones del Barça para estar presente en los octavos de final de la Liga de Campeones pasarán por Ronaldinho, su gran estrella y actual máximo goleador, con 11 tantos.

La afición barcelonista, la hinchada «culé», enfrenta con tranquilidad el partido desde que les fue confirmado que el brasileño Ronaldinho Gaúcho y el mexicano Rafa Márquez estarán en disposición de poder jugar una suerte de «final» de la Champions, ante un Werder Bremen que hace dos años, en idéntica situación, eliminó al Valencia de Claudio Ranieri.

Dos de los hombres claves en el ataque y la defensa, el brasileño y el mexicano no jugaron el sábado ante el Levante por diferentes motivos. Mientras Ronaldinho estuvo ausente por precaución, el central mexicano reaparecerá seguramente contra los alemanes tras lesionarse en Sofía, en el partido contra el Levski, que los barcelonistas ganaron por 2-0.

Tras su merecido descanso el sábado pasado ante el Levante (1-1), el brasileño volverá a jugar para liderar al grupo hacia el triunfo, según confió en conversación con la prensa: «Estoy preparado para ayudar al equipo», declaró a El Mundo Deportivo, eliminando toda posibildad de pesimismo.

«En mi cabeza sólo tengo la victoria», afirmó.

Algo menos eufórico se mostró su compatriota Edmilson Gomes, para quien «sería un gran fracaso quedar eliminados de la Champions. Somos los actuales campeones de Europa y perder no pasa por nuestra cabeza», dijo el mediocentro brasileño, que podría saltar como titular frente a los alemanes.

El técnico barcelonista, el holandés Frank Rijkaard, utilizará la tarde del lunes para practicar con todos sus jugadores las acciones de estrategia, una de las armas que tienen contra el orden alemán.

Al actual campeón de Europa y de Liga sólo le vale la victoria si desea seguir defendiendo su trono, conquistado el pasado 17 de mayo en París.

Chelsea, que recibe al Levski Sofía, y el Werder Bremen están primeros de su grupo A con diez puntos, mientras que el FC Barcelona es tercero con ocho. Un empate o una derrota de los catalanes les dejaría en esa tercera plaza, cuando sólo los dos primeros de cada grupo pasan a octavos.

Si bien el favorito es el Barça, porque nunca perdió contra el Werder y lleva una racha de 16 partidos invicto en Europa, el equipo alemán es de desconfiar cuando se enfrenta a grandes equipos y grandes retos.

Como cuando en la temporada 2004-05 eliminó al Valencia de Claudio Ranieri en la última jornada de la liguilla, viviendo una situación como la que vivirá en el Camp Nou el martes.

También líder en la Bundesliga, el Werder Bremen está en un gran momento de juego en Europa, sobre todo de dos de sus hombres, el delantero goleador Miroslav Klose –que marcó cuatro goles en los dos últimos partidos continentales– y el brasileño Diego, organizador del juego desde el mediocampo.

Su condición de «no favorito» le beneficia al Werder, que sólo necesita empatar para sacar al Barça de la liga europea, contrariamente a los culés que deberán padecer la presión de la necesidad de ganar.