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ABU DHABI, Emiratos Arabes Unidos. AP. El Barcelona completó un año perfecto al ganar ayer la final del mundial de clubes en tiempo extra 2-1 sobre Estudiantes de Argentina.
Lionel Messi marcó en el alargue para darle el triunfo al Barsa, que consiguió un logro sin precedentes al levantar su sexto trofeo de 2009. Messi remató con el pecho un centro del brasileño Dani Alves a los 110 minutos. Estudiantes se puso en ventaja a los 37 minutos con un cabezazo de Mauro Boselli, y aguantó con garra las embestidas del Barcelona _especialmente en el complemento_ hasta que Pedro Rodríguez igualó a los 89. El Barsa ganó el mundial de clubes por primera vez en tres participaciones. La banca del Barcelona estalló en celebraciones tras la victoria, mientras que los jugadores de Estudiantes lucían descorazonados.
El técnico del Barcelona, Pep Guardiola, lloró mientras el equipo esperaba para recibir el trofeo, en una noche que el volante Xavi Hernández catalogó como «histórica». «Será muy difícil», dijo Xavi sobre la posibilidad de defender todos los títulos. «Cuando uno mira la historia se da cuenta que sólo nosotros lo logramos (ganar seis trofeos en un año». El campeón de Sudamérica, que buscaba repetir el título que logró en 1968 contra Manchester United cuando el torneo se conocía como la Copa Intercontinental, mantuvo bajo control a Messi hasta el tiempo extra, cuando el delantero argentino volvió loca a la zaga con sus veloces diagonales. La «Pulga» marcó su 16to gol de la temporada y luego recibió el trofeo al mejor jugador.
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Lo que faltaba
El mundial de clubes era el único trofeo que faltaba en las ilustres vitrinas del equipo catalán, que perdió las finales de 1992 y 2006. Este año también ganó la Liga de Campeones el torneo español, la Copa del Rey, la Supercopa de Europa y la Supercopa de España. Tras dominar ampliamente en el segundo tiempo, con Zlatan Ibrahimovic y Pedro como figuras centrales, el Barcelona empató con un cabezazo de Pedro tras un pase de Gerard Piqué. Estudiantes tuvo una oportunidad de igualar en la última jugada de la prórroga, en el juego.
