Hoy 
Organizaciones comunitarias de los barrios que bordean los ríos Ozama e Isabela desarrollan grandes jornadas de limpieza de desechos, cañadas, destape de filtrantes y educación con el respaldo del Ayuntamiento del Distrito Nacional, como medidas de prevención del cólera y la temporada ciclónica.
De 400 toneladas de basura diaria que recogen las empresas comunitarias en los barrios ubicados en la margen occidental de los ríos mencionados, han subido a 600 en los últimos días. Por cada tonelada de desechos, las empresas reciben US$25, recursos que utilizan para construir peatonales, limpiar filtrantes y programas educativos.
La Fundación Comunitaria de Saneamiento Ambiental Los Guandules, La Ciénega, Guachupita y 27 de Febrero ha destapado 100 filtrantes en los últimos días con una brigada de 40 jóvenes rescatados de la delincuencia, con lo que han evitado males peores con las recientes lluvias.
Yobany Guzmán, encargado de Medio Ambiente de la fundación, destacó que además de los 100 filtrantes, de un total de 300 que existen en la zona, ya limpiaron cinco de cañadas, mientras se declara la guerra a la basura con la recogida y educación continua.
De su lado, Gilberto Santos y Emil de la Rosa, de la Fundación Saneamiento Ambiental y Comunitario (FUNSACO) resalta la limpieza en los barrios de Gualey, Las Cañitas, 24 de Abril y Simón Bolívar.
Informaron que han conectado al sistema sanitario alrededor de mil familias de los barrios mencionados que antes depositaban sus heces fecales en el suelo, a lo que atribuye que la aparición de casos de cólera en la zona sea mínima.
Mientras que Rafael Luna, de la Fundación Ambiental de La Puya (FUNDEMAPU) destacó el trabajo de limpieza de las cañadas Los Ríos, Los Girasoles, La Puya y La Yuca, de donde retiran diariamente 10 toneladas de basura, desde que se anunció el cólera en Haití, el año pasado.
Hace nueve días que no surge un nuevo caso de cólera en el sector La Puya, donde además se lleva a efecto una intensa labor de educación mediante volantes y megáfonos.
Continúan llegando inmigrantes haitianos sin control, lo que podría echar por la borda el trabajo en la zona.
