Hoy 
A la expectativa de lo que pudiera ocurrir se mantenían miles de familias en la tarde y la noche de ayer en los barrios más vulnerables del Distrito Nacional y la provincia Santo Domingo, debido a los pronósticos de fuertes lluvias y el estado de saturación de los suelos.
En lugares como La Ciénaga, Ribera del Ozama, Las Barquitas, Los Coordinadores, Las Cucarachas y otros, sus moradores no se reponen de las inundaciones provocadas por los huracanes Gustav e Ike, cuando temen volver a ser afectados por el disturbio tropical sobre la parte Noreste del país.
En cada uno de los barrios visitados las familias están conscientes de que hasta que no sean trasladadas vivirán en zozobra todo el tiempo.
No importa que después del paso de un fenómeno natural se les provean maderas y raciones alimenticias, ya que eso apenas es un paliativo del momento.
Por ejemplo, ayer cientos de personas seguían en casas de amigos y vecinos en los sectores Los Coordinadores y las Cucarachas, en Sabana Perdida, del municipio Santo Domingo Norte, ya que en muchas viviendas aún permanecían las aguas del río Ozama que penetraron a propósito de Ike.
Los afectados denunciaron abandono por parte de las autoridades, que solamente llevan algunas raciones alimenticias durante los primeros días del paso de una tormenta o huracán.
Altagracia Sánchez, madre de cuatro hijos, no ha podido retornar a su casa debido a que está llena de lodo y los pocos ajuares que pudo sacar se mantenían Los fuera a la espera del sol.
Amparo Infante, otra madre de tres hijos también espera la ayuda del sol para secar su casa y lo poco que pudo salvar luego de los efectos de Gustav y Ike.
Rafael Antonio Nicasio decidió volver a su casa en Los Coordinadores porque no tiene otra alternativa, a pesar de que su casa está rodeada de agua y las enfermedades respiratorias, fiebre y conjuntivitis abundan en el lugar.
Mientras Máxima Oviedo, con su esposo Salvador Peña, de 80 años, inmóvil por el cúmulo de enfermedades, no quiere regresar a su casa por temor a ser sorprendida por una crecida repentina del Ozama.
Familias que perdieron sus humildes viviendas durante la más reciente crecida del río Ozama permanecen arrimadas en la zona a la espera de ser tomadas en cuenta por las autoridades.
En La Barquita las organizaciones decidieron hacer su propio censo y ayer tenían registradas alrededor de 800 familias que no tienen solución a su problema de vulnerabilidad.
Rafael Holguín, dirigente comunitario de la zona, expresó que en La Barquita no quieren funditas de comidas y madera, y que esperan el traslado de las 800 familias y que el área sea tomada por Medio Ambiente y otras instituciones del Estado para evitar nuevos asentamientos.
De no atenderse el reclamo de la comunidad, sostuvo, podrían subir hasta Los Mina para hacer sentir su fuerza mediante protestas, porque están cansados de promesas.
Domingo Bueno Paulino, de la Coordinadora de Organizaciones de la Ciénaga, informó que identificaron a 200 familias en alta vulnerabilidad en farallones y pendientes, en tanto tienen mil familias en las mismas condiciones entre los puentes Duarte y Francisco del Rosario Sánchez. También observaron grandes cantidades de basura en el río Ozama.
Zoom
La mil y una
Más de 500 familias de los sectores Los Coordinadores y Las Cucarachas, en Sabana Perdida, en Santo Domingo Norte, continúan con el agua al cuello desde hace un mes debido a que a la menor caída de lluvia sus casas se llenan de agua.
La solución
Los damnificados consideran que la solución no es que les entreguen zinc y madera, sino el traslado a un lugar seguro. Todavía las aguas del Ozama inundan a decenas de casas en la zona.
Tienen propio censo
En los barrios La Barquita y La Ciénaga las organizaciones comunitarias elaboraron sus propios censos y tienen bien identificadas las familias más vulnerables. Hasta ayer ninguna autoridad había tomado en cuenta las investigaciones de los comunitarios.
Alertas por lluvias
El Centro de Operaciones de Emergencia incrementó los niveles de alertas roja para 22 provincias, seis amarilla y el resto verde, debido a los pronósticos de la Oficina Nacional de Meteorología de incremento de lluvias para las próximas horas, a consecuencia de un disturbio tropical localizada sobre el Noreste del país.
