Básicos de hoy y de siempre del armario femenino

Básicos de hoy y de siempre del armario femenino

Efe. Reportajes. Los pantalones vaqueros, el vestido de coctel negro y la camisa blanca son sólo algunas  prendas básicas e imprescindibles de ayer y hoy del armario femenino.

Pantalón vaquero.  Versátil y todoterreno, el pantalón vaquero se ha convertido en un clásico que no pasa nunca de moda. Con absoluta libertad, cada temporada se reinventa e impone sus reglas a tenor y capricho de los diseñadores. Tan versátiles como transgresores y democráticos, los jeans, prenda de ropa sport por excelencia, hoy se encuentra muy cómodo  en los estilismos tanto para el día como para la noche. 

Aunque goza del beneplácito de la mayoría de la sociedad, los pantalones vaqueros tienen reservado su derecho de admisión a muchos despachos y oficinas, así como a recepciones, ceremonias y espectáculos que requieren etiqueta. Este año se llevan muy anchos o de pitillo, desgastados, de cintura baja y con un largo que llega justo al tacón de los botines.

Vestido de coctel.  Con más de 80 años de existencia, el siempre elegante vestido de coctel es una apuesta segura para cualquier evento extraordinario que exija un mínimo de etiqueta. La gran dama de la costura Coco Chanel creó el “petit robe noir”, vestido negro, de corte sencillo y largo a la rodilla, con la intención de estilizar la figura femenina y adornarla con un halo discreto y exquisito.

Con mangas o sin ellas, el vestido de coctel, gracias a sus sobrias líneas, favorece a todas las mujeres sin tener en cuenta ni la edad ni la estatura. Ayer y hoy está considerado como un ícono de la elegancia. Esta temporada arrasan los diseños de encaje y volumen en la falda.

Traje de chaqueta.  En la década de los 80, Giorgio Armani puso de moda el traje sastre para vestir, de manera sobria y discreta, a una profesional que cada día adquiría más poder y prestigio en el trabajo. En negro es el comodín perfecto, ya que permite multitud de combinaciones con blusas hiperfemeninas, camisas de corte masculino y camisetas.

Con raya diplomática, en color camel, gris o beige resulta muy versátil para cualquier momento del día. La gran mayoría de los estilistas aconseja personalizar este uniforme con collares, lazadas y broches que otorguen una nota diferente.

Esmoquin.  Este traje de etiqueta masculino destinado para eventos nocturnos, nació en Inglaterra en el siglo XIX. Gracias al atrevimiento y al porte de actrices como Marlene Dietrich y Greta Garbo, el esmoquin tuvo un cierto apogeo en el armario femenino.

Desde que, en la década de los setenta, el diseñador Yves Saint Lauren lo adaptara para la mujer cerrando las líneas y creando curvas, se convirtió en símbolo de sofisticación, que en muchas ocasiones ha sustituido al clásico vestido largo. Hoy, el esmoquin se ha instalado con autoridad en el guardarropa femenino. Tiene poder para imponer carácter y sofisticación.

Camisa blanca.  Con cuello camisero o con manguita de farol, la camisa blanca es la perfecta compañera para cualquier ocasión. Combina bien, otorga luz al rostro, favorece y realza tanto las prendas de gala como las más “casual”. De manga larga y doble puño para poder poner gemelos, resulta siempre elegante. 

Camiseta de rayas marineras.  Las sempiternas rayas marineras en azul o rojo se cuelan cada temporada en el armario de la mujer. Este clásico estampado, vinculado al escenario de mar, lo hizo suyo Coco Chanel.

Las claves

1.  Jeans

Tan versátiles como trasgresores y democráticos, los jeans, prenda “sport” por excelencia, hoy se encuentran muy cómodos tanto en los estilismos para el día como para la noche.

2.  Esmoquin

 Desde  los setenta,  Yves Saint Lauren lo adapta para la mujer cerrando las líneas y creando curvas,  es símbolo de sofisticación.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas