Batchelor Village: Camino recto hacia
la rehabilitación

Batchelor Village: Camino recto hacia <BR>la rehabilitación

POR JOSÉ PIMENTEL MUÑOZ
MIAMI.-
Cuando cualquiera visita el “pueblito” denominado Batchelor Village no se imagina las sorpresas que lo esperan.

En un área reducida y bajo techo puede ver personas tomando un auto, montando un avión para salir en un paseo ficticio, comprando en un supermercado,  echando gasolina a su carro, adquiriendo taquillas para entrar a un cine o en la fila de un banco.

¿Por qué tantas cosas juntas?

Bueno, en realidad no se trata de un pueblito sino del área de prácticas del Centro de Rehabilitación Davis del Baptist Hospital, situado en el 8900 de North Kendall Drive.

Al centro acuden pacientes de diferentes dolencias, pero en vías de rehabilitación, que van a ejercitarse tratando de reincorporarse rápidamente a la vida social normal. Personas que han sufrido traumas (como amputaciones, fracturas, golpes en la cabeza, ataques al corazón, embolias, derrames cerebrales, etc.) se entrenan allí buscando  recuperar las destrezas perdidas.

Este village (en español aldea, pueblo o caserío, como quiera llamársele) provee una simulación realista de la vida, del trabajo y de algunos ambientes recreativos. Ubicado en uno de los edificios del enorme Baptist Hospital, es una de las valiosas y variadas dependencias del Centro Davis, destinadas todas a la rehabilitación de pacientes, la mayoría externos.

Una mañana reciente que visitamos el lugar, vimos un hombre de 47 años que había tenido una embolia practicando cómo pararse delante de una taquilla de teatro. Otro de 57 años, que sufrió un derrame cerebral, se entrenaba subiendo a un auto desde su silla de ruedas. Luego aprendería a manejar la manguera para echar él mismo la gasolina en el carro (en Estados Unidos se usa que los propios conductores surtan de gasolina sus vehículos en la estaciones de expendio). Por supuesto que el auto de práctica no camina, no prende y ni siquiera tiene motor,  pero sirve para el entrenamiento de subir y bajar y para echar combustible.

Con estos ejercicios se facilita al paciente su reinserción en la vida diaria, ya que está semi-paralizado. Ha ido recuperándose rápidamente de un accidente cerebrovascular que lo dejó sensiblemente paralizado.

Estos dos pacientes pasan hasta seis horas diarias en el lugar, que se denomina Batchelor Village, en honor a George Batchelor, quien donó a Baptist Health South Florida –entidad sin fines de lucro- las instalaciones para las prácticas.

Hay pacientes de ambos sexos y el entrenamiento depende del tipo de lesión. Algunos de ellos vinieron a Baptist Hospital desde Latinoamérica a atender sus problemas de salud desde que ocurrieron y ya medianamente recuperados van al centro, sobre el que se  puede solicitar información a través del e-mail International@baptisthealth.net.

Uno de los puntos más interesantes es un simulado pequeño restaurante y un supermercado con frutas plásticas donde el paciente aprende a comprar, así como una zona para niños.

Con los equipos de terapia, los terapeutas especializados y sus enfermos, el novedoso Centro Davis tiene bien ganada fama en el amplio sector médico miamense.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas