Bávaro-Punta Cana Jazz Festival, un derroche musical de mucha adrenalina

Bávaro-Punta Cana Jazz Festival, un derroche musical de mucha adrenalina

POR JOSELIN RODRÍGUEZ
BÁVARO.- Durante dos días reputados músicos nacionales e internacionales pusieron a vibrar en el Centro de Convenciones del Complejo Hotelero Barceló, en lo que fue la celebración de la primera versión del Bávaro-Punta Cana Jazz Festival, actividad que pretende convertirse en una opción para los amantes de la llamada música de los músicos y, al mismo tiempo, competir con los festivales que se realizan en la región del Caribe y Centroamérica.

El jazz con ricas fusiones dominó la escena musical el viernes y sábado. Por el escenario desfilaron el pianista cubano Ernan López-Nussa, el trompetista estadounidense Maurice Brown y los dominicanos Sandy Gabriel, Guarionex Aquino, Silvestre De Moya y Rafelito Mirabal con su grupo Sistema Temperado.   

A pesar de que hubo muy poca asistencia de público, es indudable que el festival se transformó en dos noches repletas de romanticismo, buenas vibraciones, brillantes ejecuciones y complicidad entre los músicos.

Jorge Estévez, presidente del Grupo Eventos, organizador del festival, dijo que “su meta es ofrecer un encuentro regional en el que los talentos que fueron contratados puedan satisfacer las expectativas del publico nacional e internacional”.

PRIMER DÍA

El viernes, día que dio inicio el festival, fue una  descarga de sensaciones y reconocimientos. La participación de Gabriel, López-Nussa y un cierre espectacular con el percusionista Guarionex Aquino, resultó una noche de muchas sorpresas.

En medio de un impresionante juego de luces y buen sonido, Carlos Almánzar anunció al primer invitado, el saxofonista Sandy Gabriel.

Aunque en un principio Gabriel no logró buena sintonía, luego de unas pocas palabras con las que agradecía su presencia, convenció a los presentes con una magnifica presentación, que incluyó temas de su primera producción “Jazzmeo”. Con una banda integrada por siete músicos, hizo una entrega de mucha calidad en el que sobresalía su ejecución del saxo. Se despidió “con la esperanza de que el próximo año el festival sea mucho mejor”.

El escenario estaba listo para recibir al cubano Ernán López-Nussa, pianista precedido de un gran reconocimiento internacional, quien de inmediato se robó el cariño y la admiración de los presentes con la agilidad y destreza que le caracteriza al ejecutar su instrumento.

Su participación estuvo repleta con el intercambio de miradas cómplices con los dos miembros de su grupo, la improvisación, y la inclusión de famosas piezas como “El cumbachero”.

López –Nussa interpretó ocho temas, a los que definió como originales pasados por el filtro del Caribe, el son y el danzón. Durante su participación, que fue ovacionada y aplaudida en todo momento, muestra una clara influencia de jazz latino, de los grandes maestros de la música clásica y del folclore cubano.

Aunque intercambió pocas palabras con el público, el pianista se ganó la admiración.

Al concluir su participación, recibió una placa con la que se le reconoce sus aportes a la música de los músicos.

El cierre estuvo en las manos del percusionista Guarionex Aquino, quien incluyó temas muy rítmicos, que arrancaron sonoros aplausos y silbidos. Definió su participación como un concierto muy íntimo, para ser disfrutado. Con Gabriel interpretó varios temas, siendo el más aplaudido “Acuarela de lágrimas negras”, que hace referencia a un famoso son cubano. Los organizadores del festival le entregaron un reconocimiento con el que premiaron su trayectoria de más de 25 años.

SEGUNDO DÍA

 El sábado le tocó iniciar a Silvestre De Moya, quien puso a vibrar a los presentes con su propuesta musical. Su interpretación subió la adrenalina de los presentes y fue muy aplaudido toda la noche. Egresado de la Universidad de Berklee, se robó el show con temas e improvisaciones. El público despidió su actuación poniéndose de pie y lanzando vítores.

Luego le correspondió al trompetista Brown, quien presentó una música vibrante y rítmica. Éste es un músico singular que pone a gozar de principio a fin. Intercambia miradas y sonrisas cómplices con los músicos, baila sin parar (a veces parecía un rapero) , es decir es una bomba en el escenario. Aprovechó para promocionar su nuevo disco “Hip to Bop” y para que visiten su pagina web.

El público disfrutó del trompetista, quien por primera vez visita el país. Fue aplaudido de pie. Brown también fue reconocido con la entrega de una placa.

Rafelito Mirabal y su Sistema Temperado cerraron la noche de jazz, sin antes ofrecer música de calidad, que fue disfrutada a plenitud. Se hizo acompañar de la artista española Alba González, que interpretó tres temas, pero con defectos de sonido. Su música está influenciada por el blues y las corrientes latinas. Esto fue notorio en  “Periblues”, una mezcla de merengue típico, bachata y blues. Con “Gagayas” finalizó y dejó un sabor a  ga-gá.

Publicaciones Relacionadas