El Banco Central, en su reunión de política monetaria de marzo de 2012, decidió mantener inalterada su tasa de política monetaria en 6.75% anual. Además, dispuso dejar sin cambio la tasa de interés lombarda en 9.0% anual.   

La decisión con respecto a la tasa de referencia se sustenta en que, en  febrero, la tasa interanual de inflación cayó a 6.0%, situándose dentro de la meta de 5.5% ± 1% para 2012. Asimismo, la inflación subyacente interanual se redujo a 4.25% al cierre de febrero, por debajo de su promedio histórico.

Dado que factores que inciden en los pronósticos de inflación no han variado significativamente desde la anterior reunión de política monetaria, las proyecciones apuntan a que la inflación se mantendría dentro de la meta establecida en el programa monetario.

En lo que va de año, las presiones inflacionarias se han mantenido bajas, alcanzando la inflación 0.35% en  febrero y un acumulado de 0.79% durante los dos primeros meses del año. Esto ha contribuido a que la inflación interanual mantenga su tendencia a la baja y que su nivel haya convergido a la meta durante el primer trimestre de este año.

El Banco Central reafirma su compromiso de conducir la política monetaria al logro de la meta de inflación de 5.5% ± 1% para 2012.

En el contexto externo, los indicadores de Estados Unidos confirman la perspectiva de recuperación gradual de esa economía, al tiempo que se espera una moderación en las economías asiáticas, principalmente la China e India.

En Europa, se mantienen las condiciones recesivas. En el país, la actividad económica y la demanda interna evolucionan dentro de lo previsto.

La cifra

4.25 por ciento. Ese fue el nivel alcanzado por la inflación subyacente interanual al cierre de febrero, por debajo de su promedio histórico. La tasa interanual de inflación cayó a 6.0%, situándose dentro de la meta de 5.5% ± 1% para 2012. Reafirma su compromiso de lograr una meta de inflación de 5.5% ± 1% para 2012.