El Banco Central Europeo estudia medidas para reducir el financiamiento de emergencia a los bancos griegos en momentos en que crece la resistencia de las autoridades a proporcionar más ayuda a las entidades crediticias del país, dijeron personas familiarizadas con las discusiones.

Funcionarios del BCE han propuesto aumentar los descuentos impuestos a los valores que los bancos ofrecen como garantía cuando toman crédito del Banco de Grecia, agregaron las personas, que pidieron que no se revelara su identidad porque se trata de un asunto privado.

Si bien el Consejo Gobernante no ha analizado oficialmente esos recortes, podrían considerarse si las autoridades de Grecia no logran convencer con rapidez a los ministros de Hacienda de la zona del euro de que pueden reformar su economía y asegurar los fondos de rescate, dijo una de las personas.

En su mayor parte, las entidades crediticias griegas no tienen acceso a las ofertas de dinero regulares del BCE, mientras que el gobierno del país, que esta semana mantiene conversaciones en Riga con sus socios de la zona del euro, se enfrenta con sus acreedores en relación con los pagos de asistencia que tanto necesita.

En la actualidad, los bancos tienen acceso a alrededor de 74.000 millones de euros (US$79.000 millones) de asistencia de liquidez de emergencia –ELA por la sigla en inglés- de su propio banco central, un monto que ha aumentado y que se analizará esta semana.

“No hay duda” de que el BCE está perdiendo la paciencia con Grecia, dijo Frederik Ducrozet, un economista de Crédit Agricole CIB en París. “Los bancos griegos necesitarán más financiamiento antes de que pase mucho tiempo, de modo que, en cierto sentido, un mayor recorte o una ELA menor son equivalentes”.

Reunión de Riga. La propuesta de los funcionarios del BCE plantea tres vías para reducir la cantidad de dinero a la que pueden acceder las entidades crediticias por determinada cantidad de garantías, dijo una de las personas. Los recortes establecidos en el marco de las operaciones de ELA no se han dado a conocer.

CNBC informó que las posibilidades comprenden devolver los recortes al nivel anterior a fines del año pasado, cuando el BCE flexibilizó sus exigencias de garantías para Grecia; fijarlos en 75 por ciento; o establecerlos en 90 por ciento. Las últimas dos opciones podrían aplicarse si Grecia se encuentra en un “impago ordenado” en el marco de un programa formal del BCE o en un “impago desordenado”, dijo CNBC, que no dio más detalles sobre las condiciones.

Un vocero del BCE se negó a hacer declaraciones.

Los funcionarios consideran que la reunión de los ministros de Hacienda y gobernadores de bancos centrales de la zona del euro en Letonia constituirán una prueba de la disposición del gobierno griego a instrumentar las reformas económicas exigidas a cambio de los últimos pagos de su paquete de rescate de 2012. Si no cuenta con nuevos fondos, para mayo el gobierno podría quedarse sin dinero.