POR ALTAGRACIA ORTIZ GOMEZ
La venta callejera de agua en funditas y en botellas, además del cúmulo de basura en las calles, han incrementado las enfermedades gastrointestinales, aseguró ayer el presidente de la Sociedad Dominicana de Gastroenterología. El doctor Diógenes García sostuvo que quienes consumen ese líquido están sufriendo diarreas, amebiásis y hepatitis de transmisión fecal-oral.

La mayoría de esas aguas no están certificadas por las autoridades competentes.

Indicó que el agua en fundita ofrecida en los semáforos no está apta para el consumo humano, porque no ha pasado el control de las autoridades.

El doctor García, quien es jefe del servicio de Gastroenterología del Hospital Juan Pablo Pinam de San Cristóbal y profesor universitario, sostuvo que en el país se está «empaquetando agua» hasta en los patios y dijo que no hay ningún control por parte de las autoridades de salud.

Indicó que otro factor que contribuye al incremento de las enfermedades gastrointestinales lo constituye el cúmulo de basura en la ciudad, porque a su juicio aumenta la presencia de ratas que producen males mortales.

Explicó que una de las enfermedades producida por las ratas es la leptospirósis, transmitida por una bacteria que ataca el cuerpo humano rápidamente. Indicó que en el diagnóstico la leptospirósis suele confundirse con otras enfermedades benignas, lo que dificulta imponer un tratamiento rápido que salve la vida de los pacientes.

«A mí me preocupa mucho cuando hay mucha basura, porque hay muchas ratas y con ellas vienen muchas enfermedades», comentó, al participar en el programa Balance, producido en el Canal 35 por los periodistas José Miguel Montero,

Ramón García y Ramiro Estrella.

El doctor García aconsejó a la población evitar el consumo de agua no certificada y llamó a las autoridades a controlar la comercialización del líquido de dudosa etiqueta.

En tal sentido, la Sociedad de Gastroenterología propone el desarrollo de campañas de concientización que orienten a la ciudadanía en torno al consumo de agua y alimentos dañinos para la salud.

Asimismo, aspira a que exista un control efectivo en las empresas dedicadas a la venta de agua en botellas, a granel y en funditas.