Sigo sin entender por qué este país no tiene un Estadio Moderno de Béisbol, una arena para el baloncesto y ahora se suma, un modesto pero funcional estadio para fútbol.
El Palacio de los Deportes Profesor Virgilio Travieso Soto, construido en 1974 para los Juegos Centroamericanos y del Caribe, el Quisqueya, que ahora responde al apodo de Juan Marichal, nombre con el que nunca estuve de acuerdo por el mero hecho de que Juanico se merecía una mejor instalación de este tiempo este fue levantado en 1955.
Sé que ha faltado voluntad del Estado en levantar ambas obras porque son instalaciones de 30 o 40 millones de dólares, un «caramelo» para la súper obras que hemos construido y con una tranquilidad pasmosa el presupuesto doble del presupuesto original.
Siendo realista, no pido que se levante ahora mismo el campo de fútbol, pero por Dios, no esperemos 50 años para eso.
Hemos avanzado mucho en el deporte, avance que debemos tanto al Comité Olímpico Dominicano el Movimiento Olímpico, con todas sus federaciones y sector oficial con Miderec y ahora con el sector privado, son el Creso a la cabeza, que han entendido el valor del deporte.
El Palacio de los Deportes y el Estadio Quisqueya necesitan de una inversión millonaria para ser remodelados o reconstruidos de una vez por todas, que allí se puedan celebrar espectáculos deportivos y artísticos de nivel.
Es tiempo de demostrarlo al mundo que nuestros deportes han crecido, lugares hay de demás, pero tenemos que comenzar, ojalá que el sector oficial y el privado se unan para darle al país dos buenas instalaciones. Las necesitamos ya.