A propósito de que el pasado 16 de diciembre del 2017 se realizó el acto de develizamiento de la estatua de Osvaldo Virgil en en su natal Mote Cristi, me permito, con la anuencia de ustedes, proponer la siguiente idea.
Mi propuesta es que nuestras autoridades y peloteros instituyan el 23 de septiembre como Día del Pelotero Dominicano en las Grandes Ligas, en honor al histórico debut de Osvaldo Virgil, el 23 de septiembre de 1956 con los Gigantes de Nueva York, convirtiéndose en el primer dominicano en jugar en Las Mayores.
Sería algo similar a lo que se hace cada 15 de abril en honor a Jackie Robinson, quien debutó el 15 de abril de 1947 con los Dodgers de Brooklyn.
Intuyo que lo que se estila en casos de esta naturaleza es que se haga una propuesta formal de nuestras autoridades deportivas y peloteros a Rob Manfred, comisionado del béisbol de las Grandes Ligas.
¿Ustedes se imaginan que cada 23 de septiembre nuestros peloteros usen en sus uniformes el número que usó Osvaldo Virgil cuando debutó en las Grandes Ligas con los Gigantes de Nueva York?
O, en su defecto, que en cada estadio de las Grandes Ligas donde se juegue béisbol ese día se haga una breve ceremonia previo a cada juego y se destaque la impronta, el legado, el rol que han jugado nuestros más de 700 peloteros.
Ese sería el mejor regalo a don Osvaldo Virgil, puesto que sería valorar en su justa dimensión al pelotero dominicano en sentido general, sus extraordinarias actuaciones, en fin, se destacaría en grado superlativo los aportes de nuestros peloteros a las Grandes Ligas.