CIUDAD DEL VATICANO. AFP. El papa Benedicto XVI, en su discurso de Año Nuevo pronunciado ayer, insistió en la necesidad de educar en valores morales a los jóvenes, quienes se convertirán en los «constructores de la paz».
Durante la tradicional misa de Año Nuevo celebrada en la Basílica de San Pedro, el Papa llamó a los líderes religiosos y educativos del mundo a contrarrestar la «cultura del relativismo» educando a las jóvenes generaciones «en la paz y la justicia».
«La cultura del relativismo pone una cuestión radical: ¿Tiene aún sentido educar? ¿Y educar para qué?», dijo el Sumo Pontífice.
«Frente a las sombras que oscurecen el horizonte del mundo actualmente, asumir la responsabilidad de educar a los jóvenes para enseñarles la verdad, los valores y las virtudes fundamentales es mirar al futuro con esperanza», insistió.
El papa deploró que la era actual esté «fuertemente marcada por una mentalidad tecnológica» en la que se educa a los niños en «una realidad social que puede conducirles a ser intolerantes y violentos».
Si se ayuda a los jóvenes a combinar «un profundo sentido de la justicia con el respeto por el prójimo» y «una capacidad para enfrentarse a los conflictos sin arrogancia», las jóvenes generaciones se convertirán en «gente de paz y en constructores de la paz», añadió el Papa.
Evitarían riesgos
Benedicto XVI insistió en que «sólo una sólida educación de su consciencia puede protegerles de estos riesgos y volverles capaces de luchar sin fin, contando solamente con la fuerza de la verdad y del bien». Esta educación, según el líder católico, «parte de la familia y se desarrolla en la escuela y durante las otras experiencias de formación».