BONAO. Varias de las familias que  se encuentran en las viviendas construidas por el gobierno de Venezuela en Bonao fueron conminadas a abandonarlas pacíficamente, so pena de ser desalojadas en las próximas horas compulsivamente si no atienden a la petición hecha por esa nación y el Estado. 

Después de eso,  el pánico, la desesperación y la angustia se han apoderado de los residentes en la comunidad Simón Bolívar, luego  de que los gobiernos de Venezuela y del país acordaron asignar exclusivamente a damnificados de las tormentas Olga y Noel las cien viviendas que construyó y donó esa nación suramericana  y cuya asignación fue cuestionada por el embajador venezolano, Francisco Belisario Landis.

Las familias están viviendo un momento de gran tensión,  debido a que hace varios días se rumora que en las próximas horas ambos gobiernos procederán a ocupar  las casas para hacer una depuración definitiva y luego proceder a entregarlas  a los verdaderos damnificados de las tormentas.

Decenas de beneficiados con las viviendas que  fueron entregadas por el gobernador Néstor Francisco Melenciano y el senador Félix Nova señalaron que sólo muertos abandonarán las viviendas entregadas en el sector Caracol-Banana. “Somos gentes pobres, y sin esperanza de un día conseguir un techo”, señalaron.

La asignación de las cien viviendas construidas por Venezuela en Bonao generó un conflicto que motivó la convocatoria del embajador Landis a su país para fines de consultas.

En las viviendas para damnificados solamente hay 28  de estos  residiendo en ellas. El resto son dirigentes políticos y empleados públicos.