Beslán sepulta sus muertos; balance víctimas sube a 335

Beslán sepulta sus muertos; balance víctimas sube a 335

BESLAN, Rusia (AFP).- Las familias de las víctimas del secuestro en la escuela de Beslan, en el Cáucaso ruso, enterraron el domingo a algunos de sus seres queridos, mientras continúa aumentando el balance de la tragedia, que se eleva ya a 335 muertos, sin contar a los miembros del comando.

   Las primeras ceremonias religiosas, casi todas según el rito cristiano ortodoxo, religión mayoritaria en Osetia del Norte, fueron oficiadas en Beslan, donde 18 víctimas han sido inhumadas durante el día.

   Tumbas improvisadas, coronadas con estacas de madera blanca, fueron cavadas en un campo preparado apresuradamente. Por grupos, de hombres y mujeres separados, familias o clanes enteros asistieron a las exequias.

   «Los osetas son un pueblo pacífico que siempre ha vivido en armonía con sus vecinos; no hay que ceder a la provocación o esto no terminará nunca», dijo un anciano durante las ceremonias, en momentos críticos ya que se temen actos violentos en el Cáucaso después de esta matanza.

   El patriarca ruso Alexis II hizo alusión a la «cara de satán» y pidió que se celebren misas en todas las iglesias de Rusia.

   El balance oficial de la tragedia ascendía el domingo a 335 muertos, de los cuales casi la mitad son niños, pero el jefe de la célula de crisis Lev Dzugayev reconoció que aumentará.

   Una trabajadora de la morgue de Vladikavkaz, la principal de Osetia del Norte, afirmó a la AFP que ya había contabilizado «394 cadáveres», información que no ha podido ser verificada. Por de pronto, una lista con más de 200 desaparecidos circula en esa república caucásica.

   «Algunos cuerpos están tan mutilados que sus familiares no consiguen identificarlos», añadió la empleada de la morgue, que no quiso dar su nombre.

   El presidente ruso, Vladimir Putin, decretó para el lunes y martes luto nacional.

   La inmensa mayoría de las víctimas murieron el viernes. Según las autoridades, los secuestradores provocaron una o varias explosiones en el interior del colegio donde había más de mil rehenes desde el miércoles y luego dispararon contra los que intentaban huir, incitando a las fuerzas del orden a lanzar un asalto.

   Numerosos cuerpos quedaron carbonizados o despedazados. El domingo, sólo habían sido identificados menos de 200 y unos 400 heridos seguían hospitalizados.

   En una declaración realizada el sábado, Putin se comprometió a tomar medidas a corto plazo para reforzar la unidad y la seguridad del país porque «se trata de una intervención del terrorismo internacional contra Rusia».

   El líder separatista checheno Aslan Masjadov reprobó de nuevo «firmemente» el secuestro e instó a la comunidad internacional a «condenar la política que hace que estas tragedias sean no sólo posibles, sino inevitables».

   El trágico desenlace del secuestro de Beslan eleva a casi 500 las personas muertas en actos terroristas en Rusia durante los últimos diez días, si tenemos en cuenta las explosiones suicidas de dos aviones que dejaron 90 muertos y un atentado en Moscú, en el que murieron once personas.

   Estos atentados fueron reivindicados por un grupo islamista extranjero, las «Brigadas Islambuli», que negó cualquier implicación en el secuestro de Beslan.

   Los servicios especiales afirmaron que el instigador de la operación era el jefe de guerra checheno Chamil Basayev.

   Treinta miembros del comando, de los 32 ó 35 que lo integraban, según las fuentes, murieron. Tres «sospechosos» fueron detenidos, anunció un responsable del ministerio de Interior oseta, Ismel Chaov.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas