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El Presidente del Banco BHD, ingeniero Luis Molina Achécar, dijo que la adopción de un modelo de gobierno corporativo ha sido una de las claves del éxito de esta entidad financiera, conjuntamente con el desarrollo de una cultura institucional basada en valores de integridad y de satisfacción del cliente.
Las declaraciones del ejecutivo bancario se produjeron en el acto de celebración del 35 aniversario de la fundación del Banco BHD, en el que fueron reconocidos 108 empleados por antigüedad en el servicio.
Molina Achécar destacó la permanencia y la identificación en todos los niveles de la organización de valores y normas de buen gobierno que fueron trazados desde el primer momento por los fundadores del Banco
El Banco BHD del presente, como el BHD de 1972, es una compañía en la que hay una clara separación entre la administración y los propietarios, entre otras prácticas de buen gobierno que garantizan la creación de valor y el cumplimiento de las leyes y regulaciones, dijo.
Como ejemplo, recordó que al momento de la fundación del Banco los accionistas eligieron como presidente a un destacado profesional, el ingeniero Samuel Conde, en vez de uno de los mismos dueños. Marcaron, así, una cultura institucional que se mantiene, y demostraron además que los intereses de los accionistas no se anteponen a los intereses de los depositantes, agregó.
En este sentido, dijo que el interés primordial del banquero debe ser velar por la seguridad de los recursos que se le han confiado.
El Presidente del Banco BHD saludó la iniciativa del Congreso Nacional de apoyar la recapitalización del Banco Central, ya que al enfrentar el déficit cuasi fiscal se garantiza la estabilidad macroeconómica, imprescindible para el desarrollo sostenible del país.
El ingeniero Molina Achécar abogó por un crecimiento con estabilidad y equidad social, para lo cual, dijo, se requiere pasar a reformas sectoriales, como son las de los sectores hipotecario, turístico, y eléctrico, entre otros.
A su juicio, están dadas las condiciones para que haya una reforma del sector hipotecario tan amplia como la que tuvo lugar en la década del sesenta, esta vez orientada a la reforma del mercado de valores hipotecarios. Es necesario entender el mercado hipotecario con una visión integral, como recipiente idóneo de recursos para la construcción de viviendas, y hacer los cambios que se requieran para su desarrollo, destacó.
