BID cambia su política de crédito

BID cambia su política de crédito

Okinawa (Japón), 12 abr (EFE).- El Banco Interamericano de Desarrollo (BID) aprobó hoy un nuevo marco de financiación para el periodo 2005-2008 y una serie de reformas en su política de préstamos para mejorar su flexibilidad y eficacia.

La Asamblea anual de Gobernadores del Banco, la máxima autoridad de la institución en la que están representados todos sus miembros, dio el visto bueno a un nuevo marco de financiación que «servirá como punto de referencia para las operaciones de préstamo en el período 2005-2008», precisa el BID en un comunicado.

De acuerdo con el nuevo marco financiero, el techo para préstamos de inversión del capital ordinario será de 20.600 millones de dólares durante el cuatrienio y el de préstamos de apoyo a reformas de políticas se situará en 9.800 millones.

Los gobernadores respaldaron también «la eliminación de restricciones en las condiciones de préstamos para hacerlos más flexibles y consecuentes en la promoción del desarrollo económico y social de América Latina y el Caribe».

El BID mantendrá sus tres categorías básicas de préstamo (de inversión, de apoyo a reformas de políticas, y de emergencia) pero eliminará los limites mínimos para los plazos de desembolsos, que anteriormente eran de 3 años para préstamos de inversión y de 18 meses para préstamos sectoriales.

Otra de las conclusiones de la 46 Asamblea del Banco se concreta en modificar la regulación de los fondos de contrapartida, de forma que el monto de financiación de estos fondos se decida de acuerdo a las necesidades del proyecto, y a su sostenibilidad y capacidad fiscal.

De acuerdo con las recomendaciones adoptadas por los gobernadores, el BID «debe dar mayor énfasis a la programación en sus operaciones de préstamo, con más flexibilidad y enfoque en las necesidades y condiciones de cada país».

Los préstamos serán autorizados en función de parámetros basados en resultados y guiados por indicadores que muestren impactos positivos sobre los objetivos de desarrollo.

Los proyectos tendrán que ser viables desde el punto de vista financiero, económico y técnico y estar dirigidos exclusivamente a los fines y programas establecidos cuando fueron aprobados.

Además, el costo de los préstamos tiene que ser sostenible de acuerdo con la capacidad fiscal del prestatario.

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