Recientemente se dio un hecho, el cual ha sido reseñado por la gran mayoría de los medios nacionales y uno que otro de aquellos que fuera de nuestro territorio siempre han pretendido endilgarnos a manera de chantaje mediático la condición de ser racista, cuando nunca lo hemos sido.
Fue el caso ocurrido en la carretera de Mendoza con Charles de Gaulle, en el municipio Santo Domingo Este, cuando una mujer de nacionalidad haitiana estaba siendo trasladada como indocumentada, en donde además se observa el momento cuando un niño era agarrado por la susodicha, lo que de inmediato provocó la intervención de los supervisores migratorios.
Ahora bien, es digno de admirar la rápida intervención del director de la Dirección General de Migración, (DGM), el señor Venancio Alcántara, el cual tal y como lo reseñó el periódico Hoy del 3 junio, 2023, actuó “Con una profunda sensibilidad por los derechos humanos y la integridad de las personas”, algo que repetimos, debe ser admirado por el grueso de la sociedad dominicana y por aquellos que desde otros lares nos viven torpedeando con el muy socorrido chantaje para hacernos responsable de la desagracia del fallido Estado haitiano.
Tan pronto se dio el suceso, en donde el menor colgaba de los brazos de una mujer, (aparentemente su madre) a través de las rejas del vehículo de la DGM, Venancio actuando con un sentido de responsabilidad muy propia en los funcionarios como él, dispuso través de la circular 0025, la destitución del agente migratorio, Juan R. Rodríguez de acuerdo con lo que dicta el artículo 94 de la ley 41-08 de Función Pública, algo que fue aplaudido por el grueso de la sociedad dominicana.
Dice la nota que “el propio Venancio Alcántara ha revelado una clara falta de tacto y un comportamiento arbitrario por parte del agente, en un momento que requería sensibilidad y respeto”, lo que como ya hemos dicho antes, provocó su separación del cargo.
El mensaje de Venancio, es una clara respuesta del compromiso que tiene el ciudadano Presidente Luis Abinader, de respetar los derechos humanos, tal y como ha sido a todo lo largo de este presente periodo constitucional, lo que debe ser emulado por otros funcionarios, aquellos que al parecer tienen su propia agenda y no la del mandatario.
«Queremos dejar bien claro que cualquier agente que viole nuestras normas será apartado de la institución. Quien incurra en acciones similares tendrá que enfrentar las consecuencias que esto conlleva», afirmó Alcántara, concluye la nota.