Efectivas vacunas contra covid-19 se han desarrollado en tiempo récord

La revista Nature publicó el 15 de febrero de 2001 un análisis secuencial que contenía mas del 90% de los tres millones de parejas de bases nitrogenadas contenidas en el genoma humano.

Esa gigantesca labor pudo ser realizada en tiempo récord, gracias al auxilio de una computación de gran capacidad y de la cooperación mancomunada de investigadores de distintos continentes.

El 14 de abril de 2003 se anunció que ya se había completado el estudio de la secuenciación. Semejante logro histórico de la ciencia es solo comparable a los descubrimientos de Newton, Einstein y de los viajes espaciales del pasado siglo.

Conocer el código genético del Homo sapiens es similar a haber descifrado la posición y el valor de cada nota contenida en el pentagrama de la vida. Ello nos capacita para corregir, sustituir, o mejorar la calidad y la duración de la bella melodía del vivir. Los conocimientos biológicos han acelerado de modo vertiginoso de tal modo que lo que ayer tardaba años en analizarse ahora lo detallamos en meses. Me limitaré a la utilización de la biotecnología en la producción de vacunas.

En su edición correspondiente al 4 de febrero de 2021, la revista estadounidense The New England Journal of Medicine publica un artículo titulado: Innovaciones en las Vacunas; Pasado y Futuro.

La especialista en enfermedades infecciosas doctora Julie L. Gerberding y el inmunólogo doctor Barton Haynes son los autores del resumen acerca de la evolución de las vacunas en los últimos 50 años. Resaltan que ya para el 1980 el 99.95% de la poliomielitis había sido erradicada en el mundo. Gracias a la tecnología de la recombinación genómica en 1986 se produjo la vacuna contra la hepatitis B, con lo que se evita la infección y cáncer del hígado.

La Organización Mundial de la Salud ha estado supervisando, monitorizando y estableciendo las reglas de juego para una distribución equitativa acorde con las necesidades de la disponibilidad de las vacunas. Se calcula en un millón y medio el número de agentes virales desconocidos presentes en el mundo animal, de ellos, entre un 38 y 50% pueden transmitirse a la especie humana generando pandemias semejantes a la de la covid-19.

Vale la pena mencionar como recalcan Gerberding y Haynes, la rapidez con que al menos 37 grupos de compañías biotecnológicas e instituciones académicas convergieron en la investigación para desarrollar en un tiempo récord efectivas vacunas contra el coronavirus.

Los modelos variaron desde la utilización de virus atenuado, inactivado, ADN, RNA mensajero, vector viral y vacuna basada en la proteína que recubre la partícula del germen.

Insiste la pareja de investigadores en que el éxito de la aceptación pública de las campañas de vacunación masiva dependerá de la confianza de la gente en la seguridad y la eficacia del producto, confianza en las compañías farmacéuticas, confiabilidad en los vacunadores y en quienes elaboran las políticas de divulgación de las evidencias científicas sobre veracidad sobre la efectividad en contra de la enfermedad y los riesgos mínimos colaterales.

Ponen como ejemplo la mala información diseminada en donde se decía que la inmunización contra el sarampión era la causante del autismo en niños. Muchos padres rehusaron vacunar a sus hijos y como resultado de ello se produjeron varios rebrotes de la enfermedad.

¡Eureka! ¡Llegó la vacuna contra la Covid-19! Ojalá que pronto esté disponible primero para quienes más la necesitan en todo el mundo.