CIUDAD DEL VATICANO.-  (EFE).- El presidente de la Conferencia Episcopal Española (CEE), Ricardo Blázquez, dijo ayer en Roma que la actitud de los 498 mártires españoles del siglo XX que mañana serán beatificados en el Vaticano «es una fuerte invitación a la convivencia respetuosa en la pluralidad».

El obispo Blázquez hizo esa manifestación en la basílica de San Pablo Extramuros, en el acto de bienvenida a los miles de españoles que se han desplazado a Roma desde toda España para la ceremonia de beatificaciones más numerosa de la historia de la Iglesia.

Entre cánticos y ondear de banderas de España y de las comunidades autónomas, el obispo de Bilbao y presidente de la CEE dijo que los mártires «situados ante la alternativa, no buscada ni provocada por ellos, de renegar de la fe cristiana y así salvar la vida o de mantenerse adheridos al Señor y así perderla, prefirieron en un gesto admirable entregar la vida temporal y recibir la vida eterna».

«¡Que elocuente se hace el Evangelio en la proximidad de los mártires!, subrayó Blázquez, que añadió que los 498 que serán beatificados hoy domingo «murieron aclamando con los labios y el corazón Viva Cristo Rey».

El prelado subrayó que unos murieron porque participaban en la Eucaristía y otros por el simple hecho de ser sacerdotes, frailes, o monjas. Blázquez agregó que los mártires preguntan a los cristianos de hoy sobre la valentía de la fe.

 «Si ellos murieron perdonando, debemos nosotros recorrer los caminos del perdón, de la reconciliación y de la paz. Su actitud ante la muerte es una fuerte invitación a la convivencia respetuosa en la pluralidad», precisó el presidente de los obispos españoles.

En la ceremonia de bienvenida también participó el cardenal de Sevilla, Carlos Amigo Vallejo, que dijo que los mártires son patrimonio ejemplar de la iglesia.