Washington. De los Servicios de Hoy. El presidente del Banco Mundial (BM) expresó ayer su inquietud  por la escalada de los precios de algunos alimentos, impulsada por una sequía y ola de calor en Estados Unidos, con “nefastas consecuencias” para los más pobres. “No podemos dejar que el alza de los precios de los alimentos a corto plazo tenga consecuencias negativas en el largo plazo sobre las poblaciones mundiales más pobres y vulnerables”, dijo en un comunicado Jim Yong-kim.

Ayer las cotizaciones de los granos volvieron a subir y con fuerza, con nuevos récords para el maíz para esta época del año, impulsado por pronósticos meteorológicos que anuncian calor y tiempo seco en regiones ya afectadas por una de las peores sequías en 25 años.

Según el BM, la sequía que afecta a varios de los grandes productores de cereales ha impulsado los precios a nivel mundial de varios productos agrícolas desde mediados de junio, especialmente la cotización del trigo (+50%) y del maíz (+45%). Por su parte, el precio de la soja subió 30% desde principios de junio y 60% desde final de 2011, según el comunicado del banco. “Hasta principios de junio los analistas apostaban por una caída de los precios tras las nuevas cosechas”, destacó la entidad, quien dijo que “la grave sequía” que afecta a la región central de Estados Unidos era entonces difícil de prever.  

Estados Unidos, que exporta más de la mitad del total del volumen de maíz a nivel mundial y un cuarto del trigo, sufre una de las sequías más graves en 25 años.

La falta de agua también afecta a varios países de Europa del Este y a la India.