Un informe económico del Banco Mundial sobre el emprendimiento, empleo y crecimiento en América Latina y el Caribe revela que la República Dominicana cuenta con 4,846 empresas registradas en plataformas de comercio electrónico, lo que equivale a unas 45 compañías por cada 100,000 habitantes.

Estas cifras colocan al país en una posición intermedia en la región, por encima de varios de sus vecinos caribeños, pero todavía lejos de las naciones que lideran la transformación digital en América Latina.

La región cuenta con alrededor de 837,000 tiendas en línea activas en estas plataformas, casi tres cuartas partes de las cuales se concentran en sus tres economías más grandes: Brasil (391,000), México (115,000) y Argentina (98,000). Sin embargo, en términos per cápita, Chile, Uruguay y Argentina encabezan la lista, con 381, 246 y 215 tiendas por cada 100,000 habitantes lo que subraya el papel del ingreso, infraestructura digital y ecosistemas de apoyo para facilitar la actividad empresarial.

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Comparada con sus pares caribeños, la República Dominicana supera ampliamente a Bahamas (944) y Trinidad y Tobago (1,354), no obstante, frente a países medianos de América Latina como Costa Rica (6,178) o Uruguay (8,320), aún muestra un rezago que evidencia desafíos en infraestructura tecnológica, acceso al crédito e integración plena de las pymes en el entorno digital.

El informe presentado ayer destaca que las empresas en el mundo digital presenta importantes limitaciones para el crecimiento, pues pocas logran lograr un éxito sostenido o escalar sus operaciones.

Los datos de Tiendanube de 2022-23 revelan que, incluso entre una muestra robusta de 33,000 tiendas que sobreviven al menos 30 días y alcanzan más de US$ 100 en ventas anualizadas, la longevidad está lejos de estar asegurada: el 15 % no dura más de seis meses, entre el 20% y el 30 % fracasa en un año y hasta la mitad cierra en dos años.

Los dueños de las empresas mencionan el financiamiento limitado (35 %), la insuficiencia de capital humano o conocimientos tecnológicos (25 %) y la falta de tiempo (22 %) como sus principales desafíos.

El BM destaca que para fomentar el crecimiento entre los emprendedores digitales se necesitan políticas combinadas. Primero la ampliación del acceso a financiamiento asequible, segundo inversiones en capacitación y tutorías para desarrollar el capital humano y fomentar mejores prácticas empresariales y ayudar a los empresarios a aprovechar las oportunidades de crecimiento.