UBI RIVAS
El Banco Nacional de Fomento de la Vivienda y la Producción (BNV) ha renovado su cartera crediticia insertándose en la promoción del desarrollo empresarial, además, de su primigenio rol de financiador de la vivienda de interés social, aupado por el Estado. En efecto, el BNV realizó una promoción innovadora al anunciar el día 07 de abril último, la reducción de la tasa de interés al 16% de interés del 18%. A sabiendas de que confronta una competencia asaz agresiva, el BNV dispuso en la última semana de junio, reducir otra vez la tasa de interés del 16% al 14.5%, extensiva a 30 años, con financiamiento hasta el 90%.

El BNV aguarda la aprobación del seguro hipotecario por la Junta Monetaria, para ampliar la cobertura de financiamiento hasta un 95%.

El 14 de junio reciente, el BNV organizó un acto en el que inició la promoción a la mediana y pequeña industria con una cartera inicial de RD$300 mm susceptible de crecer en la idéntica proporción a la recuperalidad de los préstamos.

El gerente general del BNV, doctor Leonardo Matos Berrido entiende que con el dinamismo de una política atractiva en las tasas de interés tanto para la promoción de la vivienda de interés social, la institución bancaria estatal cumple a cabalidad de propósito al que añade reforzar las PYMES.

El día 07 del presente mes, el BNV realizó un acto en La Vega en el que ofreció financiar a los cosecheros de arroz con RD$500 mm dentro del programa de pignoración Nacional con garantía de endoso de los certificados de depósitos emitidos por los Almacenes Fiscales.

El 16 de junio último, el Banco Popular anunció la aplicación de una tasa de interés entre el 14.95% y el 15.75% para viviendas, a 20 años, con un 80% de financiamiento, recibiendo un eco de 15 mil demandas, en un déficit que se croniquiza en la misma proporción del crecimiento demográfico y que hoy se estima en 600 mil unidades, modestamente contabilizando.

En esa puja, el Popular financió la bicoca de RD$2,800 mm en viviendas desde RD$800 mil a RD$1.5 mm.

Una señal clara de que son los sectores de la clase media baja la que cotiza y dispone de recursos, aunque con muchos esfuerzos, para hacerse de un techo, no así la media mediana ni alta, evidencia del deterioro de estas dos capas vitales para el dinamismo económico de una sociedad.

También la Asociación Nacional de Ahorros y Préstamos anunció la última semana de junio su respuesta al a competencia reduciendo su tasa de interés al 15%, 90% del financiamiento y 30 años de plazo, y lo propio el Banco Agrícola que proclamó el 16 de junio la reducción de su tasa del 18% al 15%, para la producción agropecuaria. El Banco de Reservas se espera que también anuncie en breve la reducción de su tasa habida cuenta de que festejó al final de junio sus activos que desbordaron los RD$100 mil mm. y canalizar una buena parte de esa suma astronómica a paliar el déficit agudo de la vivienda, sobre todo, la de interés social de menos de RD$2 mm.

Es decir, todo el sistema bancario nacional integrarse a un propósito común de facilitar financiamiento para enfrentar el déficit habitacional y reforzar el aparato productivo nacional, ahora que enfrentamos un reto colosal con los nuevos tiempos del DR-CAFTA, que supone espabilamiento, iniciativas, modernización, para superar la prueba de la competitividad y situarnos a nivel de las circunstancias, o rezagarnos, así de simple.