La Bolsa de Shanghái abrió ayer con una tendencia alcista que se moderó tras los primeros minutos, y a la media hora subía un 0.20 % después de dos días de pérdidas muy fuertes seguidas de la adopción de medidas de urgencia por el Banco Popular de China (central). Los mercados de China y Hong Kong siguen mostrando hoy mucha volatilidad, intercambiando rápidamente pérdidas y ganancias, aunque con porcentajes modestos.

Después de media hora de operaciones, el índice general de Shanghái, la principal bolsa china, subía apenas 5.87 puntos para situarse en 2,970.84, después de que justo al inicio de la sesión hubiera logrado recuperar momentáneamente el nivel de los 3,000 enteros que perdió la víspera por primera vez desde diciembre de 2014.

Tras caer un 8.49 % el lunes y un 7.63 % el martes, el índice general de Shanghái se ha beneficiado del recorte de tipos de interés (0.25 puntos porcentuales) y de la reducción del coeficiente de caja de los bancos (0.50 puntos) que el banco central chino aprobó el martes después del cierre de los mercados. Mientras tanto, la bolsa de Shenzhen, la segunda en importancia del país, abrió también con ligeros aumentos pero entró en pérdidas al poco tiempo y media hora después del inicio de la sesión bajaba un 1.33 %. En la Bolsa de Hong Kong, que técnicamente no se considera china pero que está conectada parcialmente a la de Shanghái, se produjo el movimiento opuesto- inicialmente el índice Hang Seng abrió con pérdidas que se enjugaron al rato para luego registrar un ligero aumento del 0,15 % (31,84 puntos) hasta los 21,436.8 enteros.

Por su parte, las bolsas europeas recuperaron parte del terreno perdido la víspera.