El expresidente de Brasil Jair Bolsonaro negó haber participado en presuntos fraudes con certificados de la vacuna anticovid; alegó que desconocía el supuesto esquema y reiteró que no se inmunizó contra el virus, al rendir indagatoria este martes ante la Policía Federal en Brasilia.
El líder ultraderechista fue escuchado por las autoridades por cerca de tres horas en medio de una investigación que busca esclarecer si los datos sobre vacunación del exmandatario y los de algunos de sus familiares y asesores fueron manipulados para que pudieran ingresar a Estados Unidos en momentos en que los certificados de la covid-19 eran exigidos por las autoridades de ese país.
Durante la declaración, Bolsonaro “reiteró que jamás se vacunó, que desconocía todas y cualquier iniciativa para la eventual falsificación, inserción, adulteración de su cartilla de vacunación así como la de su hija”, señaló en Twitter Fábio Wajngarten, quien fuera su asesor de prensa en la presidencia y quien le acompañó en la indagatoria.
De acuerdo con el exfuncionario, el expresidente respondió todas las preguntas; resaltó que compró más de 500 millones de dosis de vacunas y dijo que durante su Gobierno había respetado la libertad de los brasileños de inmunizarse o no contra la covid-19, así como la autonomía de los médicos.
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Por las sospechas del fraude, la Policía Federal allanó el pasado 3 de mayo las residencias de Bolsonaro y de seis cercanos colaboradores, cuatro de los cuales permanecen detenidos.
Según las indagaciones, los datos habrían sido manipulados mediante accesos ilegales a los sistemas del Ministerio de Salud realizados en noviembre de 2021 y diciembre de 2022.
En el último caso, habría sido antes del viaje que Bolsonaro, aún como presidente, hizo a Estados Unidos el 30 de diciembre, dos días antes de la investidura del actual mandatario, el progresista Luiz Inácio Lula da Silva, cuya victoria en las urnas puso en duda y a quien se negó a entregarle el poder.
Mientras estuvo en el poder (2019-2022), el ultraderechista fue uno de los líderes mundiales que más negó la gravedad de la pandemia y hasta mantuvo unas permanentes y duras campañas contra la vacunación.
Este martes, en la sede de la Policía Federal el ultraderechista también fue cuestionado sobre la intentona golpista del pasado 8 de enero en la que miles de sus seguidores destruyeron las tres sedes del poder en un intento por derrocar el Gobierno de Lula.
«Él (presidente) respondió que no guió y que no participó en ningún acto de insurrección o subversión contra el Estado de derecho”, señaló Wajngarten.