Londres.– El ministro británico de Exteriores, Boris Johnson, apoya una campaña lanzada hoy en el Reino Unido a fin de presionar al Gobierno para que acelere el “brexit” y cumpla con el compromiso de “recuperar el control sobre las leyes, las fronteras, el dinero y el comercio».
Johnson, que defendió la salida de la Unión Europea (UE) en el referéndum del 23 de junio, expresa en un vídeo su respaldo al grupo “Cambiar el Reino Unido”, que encabeza la diputada laborista Gisela Stuart y en el que participan miembros de la campaña “Vote por salir” previa al plebiscito.
En su mensaje, el jefe del Foreign Office insta a partidarios y detractores del ‘brexit’ a trabajar conjuntamente “para aprovechar la oportunidad de que este país tiene ahora que forjar excitantes nueva relaciones, con la UE y con el resto del mundo».
“Ahora más que nunca, debemos demostrar al pueblo británico que, como políticos, estamos escuchando lo que tienen que decir”, dijo. “Brexit’ significa ‘brexit’ -prosigue Johnson-, y eso significa cumplir sus instrucciones de recuperar el control sobre las leyes, las fronteras, el dinero y el comercio».
Stuart argumenta, con motivo de la campaña, que “ahora no es el momento de los que quieren salir o de los que quieren quedarse, es el momento de los que quieren hacer cosas».
El voto por salir de la UE ofrece la oportunidad de “revisar las estructuras democráticas y constitucionales”, pues evidenció “que largas partes del Reino Unido han perdido la fe en los partidos políticos y la elite de Westminster”, sostiene.
“Los británicos están impacientes por que nos arremanguemos y nos pongamos a trabajar”, afirma la diputada. Paralelamente, en un artículo en “The Sunday Telegraph”, el exministro conservador John Whittingdale, del que prescindió en el Gobierno la actual primera ministra, Theresa May, urge a acelerar el proceso de negociaciones con Bruselas.
“La activación del Artículo 50 es el comienzo del proceso, más que el fin”, escribe. “Debemos iniciar el proceso formal. No digo que tenga que suceder mañana, pero me gustaría que sucediera pronto, y con ello quiero decir semanas, no meses”, añade.
Los políticos partidarios del “brexit” han aumentado en los últimos días su presión sobre May -que en el referéndum apoyó la permanencia, pero con reservas-, mientras que esta ha indicado que no piensa activar el Artículo 50 hasta principios de 2017.
La primera ministra se ha mostrado también inconcreta sobre el tipo de acuerdo que aspira a negociar con la UE, lo que ha sido criticado por los empresarios y la oposición política.
El Gobierno de May se ha distanciado además en la última semana de comentarios hechos por varios ministros del campo del ‘brexit’, como el propio Johnson, David Davis y Liam Fox, lo que sugiere tensiones internas entre los dos bandos.