ODALIS MEJIA
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Cerca del 70% del territorio del país corresponde a suelos áridos los cuales están siendo afectados por la desertificación y la sequía.

Paradójicamente, en las tierras secas existe una gran producción agrícola como en la llanura de Peravia y los valles de Azua, San Juan, Neyba y el Cibao.

Estos datos están contenidos en el informe sobre el país en el marco de la celebración ayer del día mundial de la lucha contra la desertificación y sequía y que encuentra  degradados  los suelos  productivos.

El secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, Omar Ramírez, declaró que la situación ha empeorado  porque el bosque seco tropical, que es el segundo ecosistema más grande de  la isla,  ha aumentado su frontera, por lo que los bosques húmedos se están desertificando.

Atribuyó esto a los  cambios climáticos que presenta sequías extremas como la de  los años 1991,  1997 y 2005. Ramírez  afirmó que el monitoreo del clima ayudará a mitigar los efectos de la desertificación.

Desde el 1996 el país es miembro de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación y para dar seguimiento a la misma existe el Grupo Técnico Institucional que aglutina 40 entidades públicas y privadas. Hasta ahora se han desarrollando siete proyectos para luchar contra la degradación de las tierras, informó Víctor García, subsecretario de Medio Ambiente y punto focal de la convención.

García explicó que las tierras áridas más propensas a la degradación  y  desertificación  están en la zona suroeste y noroeste y que  en estas  se concentran los esfuerzos de la convención.

De su lado, Sixto Inchaustegui, del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) explicó que la cooperación internacional  ha aportado US$4.4 millones en acciones para la  recuperación de la  cuenca de Sabana Yegua, que ha disminuido su potencial en 25% a causa de la erosión, sedimentación y uso inadecuado de suelo. También ha invertido US$1.3 millones en  desarrollo de capacidades para manejo sostenible de la tierra. Dijo que  se trabaja en la formulación de un proyecto de manejo de la cuenca del río Artibonito.

Las claves

1.  Población

 En las tierras secas del país habitan alrededor de cinco millones de personas. La población que  vive en los suelos degradados es la más vulnerable porque es afectada por la escasez de agua, la baja producción de alimentos y la migración a núcleos urbanos.

2.  Producción

En las tierras secas se produce el 43% del arroz a nivel nacional, el 46% de la cebolla, el 82% del   guandul, el 83% de los guineos, el 82% de las habichuelas; el 66% del maíz, el 36% de los plátanos y el 75% de los tomates.