El presidente de la Unión de Farmacias, Raúl Hernández Castaños, denunció ayer que los farmacéuticos están siendo afectados económicamente en un 20% por la gran cantidad de “establecimientos ilegales” en todo el país, que se hacen pasar por farmacias y venden medicinas falsificadas, vencidas y muestras médicas.
“Aparte de afectarnos económicamente a nosotros, a quien más les afecta es a la población que incautamente va a comprar medicamentos, al creer que a esos precios que le venden están resolviendo un gran problema y finalmente no consiguen su salud. El impacto económico para nosotros las farmacias legales y serias, puede ser de un 20% a nivel nacional”, expresó.
Manifestó que Salud Pública hace el esfuerzo por resolver el problema, pero al parecer no tienen los suficientes recursos porque esto implica una alta inversión. “Recuerden que estamos hablando de una gran cantidad de establecimientos, y para cerrarlos tiene que ser una operación conjunta”.
Suplidores. Indicó que a cada instante denuncian establecimientos ilegales, pero también hay locales comerciales que habilitan para farmacias sin la autorización de Salud Pública.
Asimismo, destacó que algunos suplidores empiezan a llenar de medicamentos a esos establecimientos; entonces hay un negocio operando de manera ilegal, pero lleno de medicinas legales, y eso definitivamente debe controlarse.
Premios. Hernández Castaños habló previo a iniciar la duodécima edición de los premios “Morteros de Oro”, en el que reconocieron a dueños de farmacias que integran en todo el país.
Este año fueron galardonados Julio Curiel de Moya, del grupo Carol, al recibir “Gran Mortero de Oro”; Cristóbal Federico, de Laboratorios Magnachem, con el “Mortero Oro Especial” y César Lantigua, de la farmacia Ana María, de Santiago, con el “Mortero de Oro Póstumo”.