BERGISCH GLADBACH, Alemania.(AFP) – La selección brasileña de fútbol tendrá en los cuartos de final del Mundial de Alemania la posibilidad de romper el ‘maleficio’ que vive ante ‘les bleus’, el equipo de Francia, equipo que le propinó dos de las peores derrotas de las últimas décadas en Copas del Mundo.

Al derrotar en Dortmund a la selección de Ghana por 3-0, Brasil se metió en el bolsillo el pasaje a los cuartos de final, para chocarse de frente con Francia, que en Hannover hundió la armada de España al vencerla sin atenuantes por 3-1.

El choque entre brasileños y franceses dará a los pentacampeones del mundo la oportunidad de sacarse dos espinas que tienen atravesada en la garganta: la eliminación en la Copa del Mundo de México 1986, y la catástrofe verdeamarela en la final de Francia-1998.

En 1986 Brasil fue a México con un equipo que era una copia levemente gastada de la selección de 1982, y que contaba con el legendario Zico aún en excelente forma física. En ese momento, Brasil todavía soñaba con conquistar su cuarto campeonato Mundial.

Pero Brasil tuvo la mala suerte de cruzarse con la Francia de Michel Platini. Zico desperdició un penal en ese partido, y la decisión tuvo que realizarse mediante disparos desde los 12 pasos, y Brasil retornó a casa con las manos vacías.

Esa derrota ante Francia sepultó una generación brillante de futbolistas brasileños, y el equipo iría al Mundial de Italia-1990 con una nueva generación de jugadores. El entonces entrenador de Brasil, Sebastiao Lazaroni, anunció que comenzaba «la era Dunga».

El mediocampista Dunga sobrevivió al desastre brasileño en Italia, cuando el equipo fue eliminado por Argentina, y fue el capitán en la conquista del tetracampeonato en Estados Unidos-1994, para estar nuevamente en el equipo que jugó el Mundial de Francia-1998.

Brasil, literalmente, fue una máquina de demoler adversarios en Francia. Ganó un partido de antología ante Holanda y llegó a la final ante los franceses como amplio favorito. Pero el destino volvió a tenderle una trampa.

Horas antes de la final, el astro Ronaldo sufrió una convulsión. En el terreno era apenas una pálida sombra del artillero que había sido hasta el día anterior, y Francia humilló a Brasil con un triunfo de 3-0. La ‘maldición’ de los brasileños ante Francia estaba definida.

El partido entre Brasil y Francia por los cuartos de final que se jugará el sábado en Francfort opondrá a dos equipos movidos por motivaciones diferentes.