BRASILIA.  Brasil cerró 2014 con una inflación del 6,41%, por debajo del techo de la meta oficial de 6,5% y del índice de 2013, cuando los precios al consumidor aumentaron 5,91%, según el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). En diciembre la inflación se aceleró 0,78% con respecto a noviembre (0,51%), aunque fue menor que la del mismo mes de 2013 (0,92%), dijo el organismo estatal este viernes.

Diciembre fue el mes más costoso para los brasileños en 2014, después de marzo, cuando los precios aumentaron (0,92%). Según el IBGE, rubros como transportes, alimentos y bebidas y alquiler de vivienda influyeron en el alza de los precios el mes pasado.

Ya en el total del año, la inflación se ubicó dentro del margen de tolerancia fijado por las autoridades. El gobierno de Dilma Rousseff, que inició en enero su segundo y último mandato consecutivo, anunció medidas de ajuste fiscal para intentar acelerar el crecimiento y contener el alza de los precios.

Brasil intenta llevar la inflación a un rango anual de 4,5%, lo que según el Banco Central solo podrá concretarse en 2016. Entre las medidas previstas por los analistas está el alza paulatina de la tasa de interés, que en diciembre se ubicó en 11,75% anual. Al mismo tiempo la evaluación del real frente al dólar reducirá el valor de las importaciones, lo que se reflejará en el precio al consumidor final.

La moneda brasileña perdió un 13% de su valor respecto al dólar en un 2014 La mayor economía de América Latina espera un crecimiento cercano a cero en 2014, y de medio punto porcentual en 2015.