Sao Paulo, 22 abr (EFE).- El canciller de Brasil, Celso Amorim, afirmó hoy que el nuevo gobierno de Ecuador está retrasando la concesión de un salvoconducto al depuesto presidente Lucio Gutiérrez por temor a que se genere un estado de convulsión social en el país.

«Las autoridades ecuatorianas están diciendo que conceder el salvoconducto de inmediato, en un primer momento, puede aumentar la convulsión social», dijo Amorim a los periodistas después de dictar una conferencia en Sao Paulo sobre la política exterior brasileña.

«Pero yo estoy seguro de que él vendrá», agregó.

Brasil concedió el miércoles el asilo a Gutiérrez, después de que este se refugiara en la embajada brasileña en Quito.

El asilo, insistió hoy Amorim, no revela «simpatía, apoyo ni preferencia» por alguna de las partes en conflicto.

«Nuestro objetivo es no sólo proteger a una persona que se siente perseguida y amenazada, sino también contribuir a la paz social. A veces la presencia de una persona en un país es constante foco de agitación y rebelión», agregó.

Ayer jueves, el presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, también ordenó que a Gutiérrez se le otorgase «asilo territorial», lo que significa que el coronel retirado puede refugiarse en Brasil.

El embajador de Brasil en Quito está encargado de negociar un salvoconducto para que Gutiérrez abandone la legación diplomática «con seguridad» y sea trasladado a Brasil, informó la Cancillería.

«Nosotros argumentamos que su presencia puede continuar ayudando a perturbar la situación», dijo Amorim.

Grupos de manifestantes frente a la embajada brasileña le piden a Lula que no reciba a Gutiérrez, quien según la Fiscalía ecuatoriana debe ser juzgado en varios procesos por «represión» y «abuso de autoridad».

Gutiérrez, dijo Amorim, «pidió asilo formalmente, por medio de una carta enviada al gobierno brasileño, aceptando nuestros estatutos de no poder hacer manifestaciones políticas».

«El ya está asilado diplomáticamente, lo que falta es el asilo territorial», recordó.

Amorim repitió el argumento de otros importantes portavoces del gobierno de Lula en el sentido de que Brasil ha concedido el asilo en un esfuerzo para ayudar a tranquilizar la situación en Ecuador.

El ministro explicó que el avión que está listo para buscar a Gutiérrez llegó a despegar hacia Ecuador, pero «hubo una reconsideración del asunto» por parte de las autoridades de Ecuador y la nave regresó a una base aérea del estado de Rondonia, fronterizo con Perú, donde está a la espera de nuevas órdenes.

«Las autoridades no concedieron el permiso hasta por cuestiones de seguridad en el aeropuerto», dijo el ministro, en alusión a las concentraciones de manifestantes que han intentado frenar una eventual salida de Gutiérrez del país.

Amorim se dispone a viajar a Quito próximamente en compañía de sus colegas de Argentina, Bolivia y Perú para mediar en busca de una solución «constitucional» a la crisis ecuatoriana.

El canciller propuso hoy la creación de un Grupo de Amigos de Ecuador, formado por varios países. EFE