POR GERMAN MARTE
Brasil invierte el 7% de su Producto Interno Bruto (PIB) en Educación, más del triple que la República Dominicana, y ha logrado que al menos el 97% de la población en edad escolar vaya a las aulas.

De acuerdo con el ex presidente Fernando Henrique Cardoso (1995-2003), este empeño y esta inversión se debe a que los cariocas están conscientes de que la Educación es un factor vital (aunque no es el único) para reducir la pobreza.

Indicó que durante sus gobiernos se logró que todos los niños en edad escolar (97%), 36 millones de niños fueran a las aulas.

Sin embargo, subrayó que no basta con incrementar la cantidad de estudiantes para mejorar la educación; también hace falta incrementar la cantidad de horas que los estudiantes permanecen en las escuelas, pues no basta con cuatro horas de clase en un mundo globalizado.

Pero esto requiere una gran inversión, porque hay que garantizar que los niños puedan recibir al menos una comida, y en las escuelas de las zonas pobres dos, como está haciendo Brasil.

Se trata de un gran programa, que requiere un esfuerzo considerable. Es una labor que toma tiempo, pero es una posibilidad para reducir la pobreza, expresó Henrique Cardoso al participar como invitado en el Almuerzo Semanal de los Medios de Comunicación del Grupo Corripio.

Empero, subrayó que no basta con invertir mucho en educación; para enfrentar la pobreza también hace falta la creación de empleos, tanto por parte de los estados nacionales como de inversionistas foráneos.

Explicó que se debe buscar un equilibrio entre la inversión en Educación y en obras, pues sin educación no hay desarrollo, pero sin crecimiento del empleo “la gente va a ser motorista y abogado”. La solución no puede ser excluyente. Se necesita un equilibrio entre estas dos áreas.

El ex mandatario brasileño insistió en que la Educación debe ser una prioridad y afirmó que invertir el 2% del PIB en ese renglón es “inaceptable”, “ustedes tienen que poner más”.

SOBRE LA REELECCION

En opinión del ex presidente Cardoso, la alternancia en el poder es muy importante, “porque la tentación de no cambiar el dueño del poder es muy grande”, no para quien ejerce el mando, sino para sus amigos, su partido.

En definitiva, apuntó, quien ejerce la presidencia al final se va para “la gloria o al infierno”, pero sus amigos no, estos se quedan de alguna manera en sus puestos, “tienen sus pegas, sus enllaves”.

Dijo que la gente tiene una enorme tentación para querer que el presidente se quede, “pero por eso mismo no puede quedarse”, aún cuando sea por la vía electoral. Sostuvo que es muy positiva una sucesión en el poder cada cuatro años, porque eso traería “aire nuevo” en la burocracia, en los controles.

“Es muy importante mantener la idea de la alternancia. Toda gente que está en poder quiere quedar más tiempo” alegando que no terminó su obra, “pero las obras son infinitas”, y otro debe continuarla.

Empero, Cardoso manifestó que tampoco es partidario de un mandato muy corto y por eso favorece una reelección consecutiva, “una” subrayó. Sostuvo que no se puede aceptar la reelección indefinida, porque hace daño a los intereses de la gente.