Brasil habría adquirido tecnología
nuclear de contrabando

Brasil habría adquirido tecnología <BR>nuclear de contrabando

VIENA (AFP) – Inspectores nucleares de Naciones Unidas investigan si Brasil adquirió tecnología atómica clave de parte de una red de contrabando que también habría proporcionado material a Irán, Libia y Corea del Norte, señaló este viernes un experto norteamericano en no proliferación nuclear.

   «Observen el desempeño de esas centrifugadoras (en Brasil). Son muy parecidas a las P2» vendidas por la red del científico paquistaní Abdul Qadeer Khan, dijo a la AFP vía telefónica Henry Sokolski, un ex responsable del Pentágono a cargo del Centro de Estudios Políticos de No Proliferación en Washington.

   Por su parte, el gobierno brasileño negó enérgicamente este viernes por medio de un comunicado divulgado por el Ministerio de Ciencia y Tecnología haber comprado centrifugadoras a Pakistán.

   En ese texto, el ministerio expresó que «repudia noticias divulgadas y atribuidas a fuentes anónimas sin el respaldo de cualquier institución o país, y que buscan asociar décadas de desarrollo científico y tecnológico a procedimientos oscuros o a escándalos internacionales».

   En tanto, la vocera de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Melissa Fleming, afirmó que «por el momento no hay indicios de que ningún otro país haya comprado a la red Khan», con excepción de Irán, Libia y Corea del Norte.

   La agencia basada en Viena investiga a Irán por denuncias norteamericanas según las cuales Teherán desarrolla armas nucleares en forma secreta.

   La AIEA también trata de recabar información sobre las operaciones de la red Khan, que quedó al descubierto luego que el padre de la bomba atómica paquistaní fuera arrestado a principios de año.

   Las centrifugadoras son utilizadas para enriquecer uranio, un proceso que produce combutible para reactores civiles, pero también para fabricar armas atómicas.

   Brasil bloquea desde febrero pasado la visita de inspectores de la AIEA que quieren controlar sus instalaciones de enriquecimiento de uranio.

   Sokolski dijo que los brasileños «no quieren que nadie vea la forma de los revestimientos y los rotores» de sus centrifugadoras.

   Según esá previsto, inspectores de la AIEA deben llegar a Brasil a mediados de octubre para resolver esta cuestión.

   El comunicado del Ministerio brasileño subrayó que «la negociación sobre el proceso de inspección de salvaguardas, a ser implantado en la unidad de enriquecimiento de uranio de las Industrias Nucleares de Brasil (INB), sigue su curso normal (…) sin espacio para especulaciones sobre cualquier negativa de acceso (a los expertos de la AIEA) o de incumplimiento de acuerdos internacionales por parte de Brasil».

   Brasil, que posee una de las reservas de uranio más importantes del mundo, negó en febrero y marzo pasados el acceso de los inspectores de la AIEA a su planta de enriquecimiento de uranio de Rosende, en el Estado de Río de Janeiro, afirmando que quería proteger secretos comerciales industriales.

   El director general de la AIEA, Mohamed ElBaradei, dijo que Brasil, de quien se cree desarrolla un programa nuclear pacífico, no debe ser una excepción a las normas de la agencia de la ONU.

   El experto Sokolski afirmó que hay quienes dicen que «Brasil trabajó en su tecnología de punta a fines de 1990», en referencia al período en el que la red de Jan se encontraba especialmente activa.

   Pero expertos cercanos a la AIEA dijeron a la AFP que no creen que Brasil haya estado en contacto con la red de Khan.

   «Podrían haber obtenido alguna ayuda externa con tecnología sensible, pero, aparentemente, Brasil desarrolló centifugadoras con algunas características únicas», afirmó un experto que pidió permanecer en el anonimato, reforzando la teoría de que Brasilia intenta ocultar sus plantas de enriquecimiento de uranio para evitar el espionaje industrial.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas